Este 26 de febrero se celebró uno de los hitos históricos de la región, el llamado Puntarenazo. La manifestación, que ocurrió en 1984, fue la primera protesta pública que se realizó en rechazo al régimen del general Augusto Pinochet, la cual terminó con la detención de 16 personas. A 40 años del hecho, la ciudad conmemoró el momento en el mismo lugar en que ocurrió: la Plaza de Armas Benjamín Muñoz Gamero.

La actividad fue “un reconocimiento a los medios de comunicación, por el rol importante que jugaron. Sabemos que levantar la información y difundirla no era como los tiempos de ahora, por tanto, es un valioso reconocimiento”, destacó José Ruiz Pivcevic, delegado presidencial, quien agregó que también es bueno “reconocer a todas las personas, porque fue el pueblo el protagonista durante esa jornada”.

Así, el lugar ayer no solamente contó con recortes de las notas de prensa del momento, sino que también con una intervención artística por parte del colectivo Askutálak.

“Desde nuestro lugar como artistas escénicos generamos una intervención callejera que fue producto de una convocatoria abierta que realizamos. En un trabajo de cuatro ensayos. Logramos generar una intervención haciendo un trabajo de memoria por medio de la recopilación de archivos, audios y relatos de quienes estuvieron en ese mismo momento. Desde nuestra perspectiva, realizamos un trabajo bien acabado en cuanto a la investigación del contenido histórico y de memoria para poder generar una estructura que tuviera una base sólida con base en lo que fue realmente la historia”, comentó Martín Andrade, director creativo de la intervención.

Por su parte, Manuel Aguilante, presidente de la Agrupación de Usuarios del Programa de Reparación y Atención Integral de Salud y Derechos Humanos, destacó la importancia de la realización de este tipo de actividades, pero igualmente recalcó la necesidad de que se realicen más a menudo: “Desde que volvimos a la democracia se debería haber hecho cada año. No es posible que esto se de cada 20, 30 o 40 años. Esto debe ser una educación cívica que debe estar cada año”.

“Espero que esto permanezca en el tiempo. Que cada año se realice este tipo  actividad, ésta y otras, para poder tener verdaderamente la historia de lo que nos pasó acá en Magallanes y en Chile”, cerró Aguilante.