El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Punta Arenas ha condenado a Gustavo Andrés Narváez Cuellar y Jonathan Gabriel Almarza Reyes a una pena de cinco años de presidio efectivo por el delito de tráfico de drogas. La sentencia se dictó tras un operativo de la Brigada Antinarcóticos y contra el Crimen Organizado (Brianco) de la PDI, que interceptó un cargamento de cocaína oculto en una lavadora.
Detalles de la operación
La investigación comenzó el 4 de junio de 2024, cuando funcionarios de la Brianco, con la ayuda de perros detectores de drogas, identificaron una encomienda sospechosa en las dependencias de una empresa de transportes en Punta Arenas. El paquete, registrado a nombre de una mujer, contenía una lavadora que, al ser revisada bajo autorización judicial, reveló seis paquetes rectangulares con un total de 6 kilos y 481.42 gramos de clorhidrato de cocaína.
La droga había sido enviada desde la Región Metropolitana con destino a Punta Arenas. Tras el hallazgo, y en conformidad con la Ley N° 20.000, la PDI llevó a cabo una entrega controlada, sustituyendo la sustancia ilícita para seguir el rastro de los implicados.
La captura y el juicio
El 5 de julio de 2024, Narváez Cuellar y Almarza Reyes se presentaron en la empresa de transportes para retirar la encomienda. Al hacerlo, fueron detenidos inmediatamente por los agentes de la PDI.
Durante el arresto, se les incautaron varios objetos, incluyendo:
• A Gustavo Narváez: un teléfono celular, la boleta de compra de la lavadora, un comprobante de la empresa de transporte y 40,000 pesos en efectivo.
• A Jonathan Almarza: el automóvil Chevrolet Corsa en el que se transportaban, un teléfono iPhone y 45.000 pesos en efectivo.
Tras el juicio oral, el tribunal consideró que las pruebas presentadas por la Fiscalía eran concluyentes. Ambos imputados fueron declarados culpables como autores del delito de tráfico de drogas, recibiendo una condena de cinco años de cárcel que deberán cumplir sin beneficios.