El 40% de los docentes del país reconoce haber sufrido algún tipo de agresión por parte de estudiantes, según el Índice Nacional de Bienestar Docente, elaborado por el Laboratorio de Investigación e Innovación Docente de la Universidad San Sebastián (LIID-USS), el Instituto de Bienestar Socioemocional (IBEM) y el Centro de Innovación en Liderazgo Educativo (CILED) de la Universidad del Desarrollo, junto a Elige Educar y la Fundación Santillana.
La encuesta —aplicada de manera online a profesores de establecimientos municipales, particulares subvencionados y particulares pagados— muestra que el 60% nunca ha sido agredido, mientras que un 25% dijo haberlo experimentado “dos o tres veces”, un 8% “al menos una vez al mes” y un 5,4% “una vez a la semana”.
Pese a las cifras, el 76% de los docentes asegura sentirse seguro en su establecimiento, y el 57% califica la convivencia escolar como “buena” o “muy buena”.
“Después de la pandemia no hemos logrado mejorar las relaciones dentro de los colegios ni apoyar a las comunidades escolares a entender cómo el bienestar de estudiantes también va a predecir la relación con sus profesores”, explicó Jorge Varela, investigador del IBEM-UDD.
El estudio advierte, sin embargo, que la violencia y el bajo apoyo institucional siguen afectando el desempeño profesional y la permanencia en la docencia.
Además, el 67% de los profesores declara presentar problemas de salud mental: un 30% los califica como “leves”, un 19% “moderados”, un 12% “moderadamente severos” y un 7% “severos”. Más de la mitad, un 51,6%, dijo que el bajo ánimo afecta “un poco” su desempeño o sus relaciones laborales, mientras que un 22,9% señaló que el impacto es “muy” o “extremadamente” alto.