El cierre del gobierno de Estados Unidos se convirtió ayer en el más largo de la historia del país al entrar en su día $36$, superando el récord anterior de 2018-2019. El conflicto radica en la lucha que mantiene el Congreso por el financiamiento a la atención médica y una exigencia demócrata de extender los subsidios mejorados de la Ley de Cuidado de Salud Asequible ($Obamacare$).

Otro problema central es que el Presidente Donald Trump ha exigido que los republicanos eliminen la regla del obstruccionismo parlamentario en el Senado, que requiere una mayoría de $60$ votos para aprobar la mayoría de las leyes.

Trump escribió en Truth Social: “¡Terminen ya con la obstrucción parlamentaria, pongan fin de inmediato al ridículo cierre del gobierno y, lo más importante, aprueben todas las maravillosas políticas republicanas!”.

El líder de la mayoría del Senado, el republicano John Thune, esbozó una estrategia para avanzar, combinando un nuevo proyecto de ley de medidas a corto plazo para reabrir el gobierno con la votación sobre una extensión de los subsidios de $Obamacare$. Varios legisladores creen que el cierre podría llegar a su término para el fin de semana si las conversaciones avanzan.

Consecuencias masivas: Aeropuertos y alimentos

El cierre ha provocado la suspensión temporal de empleo o la obligación de trabajar sin cobrar un sueldo para muchos funcionarios federales.

• Ayuda alimentaria: Una de las mayores consecuencias es la interrupción de la ayuda alimentaria a decenas de millones de estadounidenses que participan en el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP). El Gobierno acordó usar fondos de emergencia para pagar parcialmente los beneficios de noviembre, pero los beneficiarios solo recibirán la mitad de su asignación habitual.

• Caos en aeropuertos: El secretario de Transporte, Sean Duffy, advirtió que podría tener que cerrar partes del espacio aéreo nacional la próxima semana debido al potencial “caos masivo” por la escasez de controladores de tráfico aéreo. El presidente del sindicato de controladores aéreos afirmó que la industria podría tardar “semanas” en recuperarse, y que las filas de tres horas en el control de seguridad serán el menor de los problemas.

• Personal esencial afectado: Controladores aéreos, personal de seguridad aeroportuaria y trabajadores del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) deben trabajar durante el cierre sin recibir su salario habitual.

• Militares: Unos $37.000$ soldados estadounidenses, incluidos los de bases en Alemania y Baviera, se encuentran preocupados por su sueldo.