Llegó el invierno y algo de nieve, con lo que, más que una invitación a quedarse en la comodidad y el calor del hogar, podemos ver aquí, una oportunidad para disfrutar y apreciar de los atractivos patagónicos de una manera distinta.
Esta semana les escribiré acerca de una actividad que se ha convertido en muy popular puesto que el nuevo tramo de la ruta 9 sur de la capital regional, nos acerca a pocos kilómetros a nuestro destino elegido en esta ocasión: el Faro de San Isidro.
Ubicado aproximadamente a 70 kilómetros al sur de Punta Arenas, es llamado como el último faro continental de América. Para conocerlo debemos avanzar hasta la llamada Punta El Árbol, en vehículo particular o algunas veces a la semana desde el terminal rural, saliendo a las 7 horas que nos acerca hasta el río Santa María.
En el fin de la ruta 9 es donde comenzamos la caminata, que en su totalidad es por la orilla del estrecho, pasando por barro, arena y rocas.
A pesar de estar a tan solo 4 kilómetros desde el fin del camino, este tramo representa ser de una belleza escénica única en el mundo, donde podemos contemplar numerosa avifauna, frondoso bosque de un clima frío lluvioso, numerosos cordones montañosos de Isla Dawson, cordillera Darwin en Tierra del Fuego e islas del sur de la península de Brunswick, como, por ejemplo, isla Capitán Aracena.
Avanzar por la orilla del estrecho puede resultar muy duro para los que no tienen una condición física optima, en todos los casos recomiendo siempre ir acompañado, llevar mapa, brújula y o GPS, kit de primeros auxilios, calcetines de cambio, ropa de abrigo, bloqueador solar y gafas para el Sol.
En el recorrido del sendero no encontramos agua para beber, los arroyos resultan ser de muy poco caudal y en época invernal traen consigo muchos residuos orgánicos, es por esto por lo que debemos llevar el agua suficiente y comida para el esfuerzo físico de aproximadamente cinco horas, considerando ida y vuelta.
Al llegar al Cabo San Isidro nos encontramos con la pequeña hostería, por estos días, resguardada por su cuidador e inmediatamente al salir de frondosos chilcos, nos regocija ver la imagen del faro en lo alto de un pequeño cerro.
Este lugar histórico para los navegantes del estrecho y habitantes del sur de la península está presente desde 1904 y fue construido por el ingeniero Escoces George Slight.
Si nació por estos lados y se dice magallánico, prepare el ánimo, mochila y planifique esta excursión de un día por esta hermosa ruta escénica e histórica de Punta Arenas.