Además de lesiones y amenazas en contexto de violencia intrafamiliar. En la audiencia la víctima le gritó a su ex pareja que dijera la verdad. Por hacerle perder el bebé a golpes en el vientre a su ex pareja, la justicia condenó ayer a Julio Ricardo Francisco Ríos Ruiz, acusado por la fiscalía de aborto malicioso, lesiones y amenazas en contexto de violencia intrafamiliar, en perjuicio de su ex pareja Rosa Oyarzún Barrientos.
La sentencia se conocerá el próximo lunes, pero como el acusado aceptó el procedimiento abreviado que planteó el fiscal Eugenio Campos, lo más probable es que lo condenen a una pena de tres años y un día, más 100 días de presidio por las lesiones provocadas a la mujer y 61 días por las amenazas.
Lo que no está claro es si el juez Jaime Álvarez le concederá al condenado la posibilidad de cumplir la pena en libertad. Es muy probable que ello no acontezca debido al pésimo informe presentencial que elaboró Gendarmería, que no hace recomendable la libertad de Ríos Ruiz. Pero esto se sabrá el lunes 25, a las 12.30 horas, cuando se lea sentencia.
Víctima
La víctima asistió ayer a la audiencia de preparación de juicio oral. Estaba sentada entre el público y al escuchar la acusación fiscal le vinieron a la memoria los terribles momentos que sufrió en manos de su ex pareja. En un momento le gritó, instándolo a decir la verdad. Entre lágrimas luego pidió que lo castiguen con una pena ejemplificadora.
Como querellante actúa el abogado del Servicio Nacional de la Mujer, Ramón Ibáñez Álvarez, quien se hizo parte en esta causa a través de una querella criminal.
Brutal
Julio Ríos agredió brutalmente a su pareja, hasta hacerle perder el bebé en gestación. Por esto fue detenido, formalizado y enviado a la cárcel a cumplir prisión preventiva. Desde octubre del año pasado permanece privado de libertad.
Amenazas no condicionales en contexto de violencia intrafamiliar; lesiones menos graves en contexto de violencia intrafamiliar y aborto malicioso, fueron los delitos por los que la fiscalía abrió una causa en su contra.
A mediados de septiembre del año pasado, la víctima fue al Lider donde se encontró con Ríos. Ahí discutieron y más tarde Rosa Oyarzún fue amenazada de muerte.
La relación de la pareja iba muy mal, por numerosas desavenencias y discusiones. Luego ella descubrió una infidelidad y cuando le pidió explicaciones el sujeto la terminó golpeando.
Ese día Ríos le enterró un cuchillo en el cuero cabelludo. Luego tomó una plancha eléctrica y aprovechando que estaba con pijama manga corta le quemó un brazo.
Luego, en agosto del mismo año, estaba en casa con su hijo y el ex conviviente, quien sospechaba un embarazo. Después de exigirle que comprara un test de embarazo, lo que hizo el 13 de agosto, el sujeto le pide hacer dormir al niño y luego que se practique el test. Como el resultado fue positivo, Ríos la pateó violentamente en el estómago. La tiró del pelo, la arrastró a un dormitorio, la botó al piso con el vientre materno hacia arriba, y comenzó a saltar sobre ella mientras le gritaba que se quedara callada: “Déjate pegar o va a ser peor”.
Durante 30 minutos fue torturada de esta manera y sólo dejó de golpearla cuando vio que estaba perdiendo líquido. Sin embargo el agresor salió un rato y al regresar a la casa continuó agrediéndola.
Al día siguiente los dolores eran tan intensos que la mujer fue de urgencia al hospital donde los médicos constataron que había perdido el bebé.