Después de dos años de expediciones por regiones remotas del planeta, Danilo Callegari tomó por primera vez la opción de abandonar una prueba. Las condiciones climáticas con las que se encontró en el Estrecho de Magallanes hicieron que el deportista extremo desertara en su aventura. El domingo 5 de mayo, el italiano Danilo Callegari se embarcaba en Punta Arenas para una aventura más, de las tantas que ha hecho en el periodo de dos años. El deportista extremo pretendía recorrer 380 millas náuticas (700 kilómetros) a bordo de su kayak, desde el Océano Pacífico al Atlántico, atravesando la totalidad del Estrecho de Magallanes.
Sin embargo, las condiciones climáticas de la Patagonia terminaron triunfantes ante la osadía del italiano. Las olas de varios metros de altura, las ráfagas de viento de hasta 180 kilómetros por hora y un promedio de temperatura de 2 ºC, no permitieron que Callegari lograra el gran objetivo.
A pesar de no conseguir lo que se había propuesto, el deportista no se siente frustrado ni mucho menos, lo ve como una experiencia más y como un desafío con el cual se podrá encontrar nuevamente en el futuro.
Declaraciones
“Después de años de expediciones por regiones remotas del planeta es la primera vez que tomo la difícil decisión de renunciar”, fueron las primeras palabras que expresó tras desertar su aventura.
La renuncia llegó a menos de 37 kilómetros al sur del Faro Félix, es decir, a más de 60 millas de Bahía Misericordia, informó a través del teléfono satelital con el cual contaba, información que fue publicada en la página web donde día a día describía la experiencia vivida y donde sus seguidores se informaban a través de tablets, computadoras y teléfonos inteligentes.
“Esto para mí fue una gran lección de la vida, la naturaleza, más que nunca, hasta ahora, ha decidido en todos los aspectos. Mi mente se combina con la experiencia de los años y me ha llevado a esta decisión, estoy vivo, eso significa que todavía tengo la oportunidad de intentarlo de nuevo, tomar decisiones y cambiar en muchos aspectos, en varios niveles. La renuncia o el fracaso de una aventura como ésta es parte del programa, lo que importa es entender y aprender de los errores para encontrar el camino correcto, es la mejor manera para volver a intentarlo”, dijo Callegari quien ya se encuentra en Italia planificando alguna nueva travesía.
Si bien la naturaleza fue más fuerte esta vez, el deportista deja entrever en sus declaraciones que no se da por vencido y que, en algún momento, volverá a desafiar este recóndito lugar del fin del mundo.