En momentos que más de 300 personas han sido despedidas en las diversas filiales de la Empresa Nacional del Petróleo a lo largo del país, más de un centenar de ellas en Punta Arenas, la revelación de los bonos y beneficios acordados por la estatal tanto en sus procesos de negociación colectiva, como en los procesos de captación de altas gerencias, adquieren un nuevo y dramático cariz.
Esta semana, cooperativa.cl tuvo acceso al contrato colectivo de ENAP Refinerías Bío Bío, el cual fue pactado en 2017, en momentos que la estatal ya acumulaba millonarias pérdidas producto de una gestión altamente cuestionada.
El documento incluye el pago de bonos de cumplimiento de contrato colectivo por un monto que, en promedio, alcanzó los $17 millones en la filial ENAP Bío Bío.
En Magallanes, este bono alcanzó los $8 millones por trabajador, en promedio, según reveló a ANÁLISIS, el presidente del Sindicato de Trabajadores de ENAP Magallanes, Alejandro Avendaño.
¿Jugaron estos bonos un papel relevante en la crisis que atraviesa la estatal?
Avendaño rechazó de plano que la otorgación de este y otros beneficios sindicales fruto de sucesivas negociaciones colectivas a lo largo de décadas, haya tenido un papel preponderante en la crisis que vive la compañía. “Estos bonos fueron otorgados por la empresa tras pasar dos filtros, el Directorio de la compañía y el propio Ministerio de Hacienda. Aquí, se quiere desviar el foco de la discusión pues el problema de fondo es la mala gestión de ENAP”, responde.
Más aún, Avendaño entrega un dato revelador. “El plan de despidos no tocó en absoluto a las altas gerencias. ENAP sigue operando con 46 gerencias lo que a todas luces excesivo. Comunicaciones no era gerencia y ahora lo es. Y áreas que antes eran una sola gerencia, se han dividido en cuatro. Y si hablamos de beneficios, nosotros tenemos un aporte por educación acotado, en cambio los altos gerentes tienen bonos de educación ilimitados, es decir, pueden enviar a sus hijos a donde se les antoje y al costo que sea y ENAP tiene que pagárselos”, respondió.
El presidente del Sindicato de Trabajadores de ENAP Magallanes, insistió en que los montos pagados a sus afiliados son menores a los de otras filiales.
Nos contactamos a su vez, con el Sindicato de Profesionales de ENAP Magallanes para conocer su opinión sobre este tema, pero declinaron entregar su versión. Lo mismo ocurrió con la propia ENAP Magallanes.
MONTOS
Aunque cada contrato colectivo es diferente en las respectivas filiales, el contrato de ENAP Refinerías Bío Bío, puede resultar indicativo de la realidad que vive la empresa, firmado el 15 de junio de 2017 y aplicable por tres años en favor de 668 trabajadores de la planta ubicada en Hualpén, Región del Bío Bío.
Solo por concepto de bono de fin de conflicto la petrolera pagó alrededor de 70 millones de dólares.
La empresa pagó, además, el 50 por ciento del sueldo como gratificación, pese a estar con números rojos.
En promedio los bonos fin de conflicto fueron de $17.000.000 por trabajador.
BONO
A mayor detalle, por concepto de bono de término de conflicto o cumplimiento de contrato colectivo, ENAP pagó a cada trabajador un monto fijo de 5,05 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), lo que a julio de 2017 equivalía a 208 mil pesos; como el convenio es por tres años, ese monto se multiplicó por 36 meses lo que puso una base de aproximadamente 7 millones 500 mil pesos para todos los socios.
A eso se agregó una suma variable compuesta en el pago equivalente a 5,694 días de sueldo: eso multiplicado por 36 meses da la cifra de 205 días de trabajo.
El salario más bajo de un trabajador de ENAP Biobío compuesto por un sueldo base, gratificaciones, bonos de turno, mantención, construcción, turno fijo y mantención fijo es de un millón de pesos mensual, por ende el día de trabajo se paga a 33 mil pesos. Con lo anterior, el bono mínimo entregado es de 14,2 millones de pesos. La estimación es que el más alto fue de 42 millones de pesos.
Además si el funcionario lo estimaba necesario podía solicitar un préstamo blando de ocho millones de pesos, sin intereses y reajustes aparte del bono, a pagar en tres años.
Ese bono fue pagado de una vez, y mensualmente se justifica en las liquidaciones de sueldo de los trabajadores como un ingreso que es descontado en el mismo documento.
ACONCAGUA
A su vez, “El Mercurio” accedió al Convenio Colectivo del Sindicato de Enap Refinerías Aconcagua, que lidera el presidente de Fenatrapech, Nolberto Díaz, y que rige entre julio de 2017 y junio de 2020.
En el texto queda de manifiesto que el costo empresa de ese contrato -que cubre a 581 socios- es de US$ 160 millones en tres años, considerando remuneraciones, bonos, becas y múltiples beneficios. Este contrato supone un aumento de los costos de 1% anual, en línea con los límites definidos por el Ministerio de Hacienda para todas las empresas del Estado.
Díaz declaró, al respecto, “No porque se pague bien o se respete y se apoye la actividad sindical eso tiene que servir como chantaje para silenciar la voz del movimiento sindical”. Díaz agregó que tales montos están en línea con la realidad de la industria.
@PedroEscobar