En menos de 20 días, Punta Arenas pasó del tercer al primer lugar como la comuna de casos activos. Los datos daban cuenta de una posible disminución de contagios diarios, pero la capital regional está lejos de ello, aunque en la última semana, Magallanes disminuyó sus casos diarios -según datos del ministro Paris- en un 15 por ciento. 

Pero a inicios de semana, la máxima autoridad sanitaria de salud a nivel nacional pronosticó un aumento de casos para enero del próximo año que podría definirse como “la segunda ola” con más de 9 mil casos diarios. Aunque en principio se dio una fecha exacta, el jueves se dijo que fue una “proyección” y que si la población acata todas las medidas sanitarias todo esto puede evitarse. 

Magallanes ya se encuentra en esa segunda ola, y la proyección da cuenta de que, en el próximo año, Punta Arenas y Natales podrían estar en Fase 2 o 3, y por qué no cuatro. 

Pero cuando el norte del país se encuentre en esa segunda ola ¿En qué etapa se encontrará la región más austral del país? 

El seremi (s) de Salud, Eduardo Castillo, explica que no se puede ni descartar ni asegurar cualquier escenario porque la pandemia es dinámica. 

“No podríamos dar por superada la segunda ola mientras los casos no disminuyan y no podamos avanzar de fase. Una vez que epidemiológicamente uno de por terminada esta segunda, que la cantidad de casos esté controlada dentro del los parámetros del Ministerio de Salud, ahí recién, podríamos hablar de una nueva ola que implicaría una duplicidad de casos”, dice Castillo. 

El académico asociado de la Escuela de Medicina de la Universidad de Magallanes y doctor en Fisiología, Cristian Núñez, destaca que el “temor” de las autoridades nacionales, es la época estival que está próxima a vivirse en varias regiones y comunas del país, especialmente Santiago. 

- ¿Pero para esa fecha Magallanes podría estar en una tercera ola?

“Todo va a depender del comportamiento que tenga la población durante esta pandemia para prevenir contagios y futuras olas. Ahora, en la historia es relativo. No hay ninguna forma de pronosticar si es que existirá una o más olas, sin embargo, creo que una de las cosas que tenemos a favor es que la vacuna va a estar pronto y nosotros estamos tratando de convivir con el virus y creo que ese es un aprendizaje”. 

A pesar de la posible solución para el virus -que sería la vacuna- el doctor Núñez precisa que, cuando llegue ese momento, se debe continuar con el uso de elementos de protección personal “porque tenemos que saber convivir con este virus por lo menos entre dos o tres años”.