Construir una mejor ciudad de aquí al 2050.
Este es el objetivo de la Mesa “Punta Arenas: la ciudad que queremos”, en la cual participaron la Cámara Chilena de la Construcción, Corporación Ciudades, urbanistas, autoridades y diversos actores en total 30 personas.
“Nos hemos fijado un plazo al año 2050, eso implica 30 años más, y significa que si no hacemos cosas ni tomamos decisiones hoy, en el futuro vamos a tener problemas”, afirmó el director ejecutivo de Corporación Ciudades, Juan Manuel Sánchez en conversación con Pingüino Multimedia.
Para él, es crucial planificar la ciudad del futuro hoy. “Tenemos que tener una estrategia para evitarnos problemas y tendencias que están ocurriendo en Punta Arenas y que también ocurren en otras ciudades del país. En forma continua hemos tenido 30 personas que han participado de esta instancia, entre ellos académicos, vecinos, personas de la sociedad civil, distintas autoridades que sirvieron de base para seguir estructurando cómo queremos hacer progresar la ciudad”, explicó.
La primera parte del proyecto tendrá un costo de 350 millones de dólares y contempla la revitalización casco histórico, desarrollo de un “distrito del conocimiento”, la implementación de dos “Corazones de Barrio”, la renovación de Eje Transversal Sur, la ampliación y mejoramiento de la Costanera y la intervención del Río Las Minas.
En este último punto, Sánchez enfatizó que se esta planificando la realidad del sector, para que no se produzca una situación como la inundación del año 2012.
“Se propusieron cerca de seis proyectos y uno de ellos fue el Río Las Minas. Éste es un torrente que tiene la particularidad, sobre todo con el escenario de cambio climático, genera caudales que finalmente van a parar a la parte construida de la parte baja, donde hay una poca diferencia de gotas entre la base del río, la de las viviendas y la parte donde está construida. Por lo tanto, lo que planteamos es volver a la lógica de la naturalidad del río. Es hacer una apuesta ecológica de la ciudad. Y eso creemos que es muy relevante, ya que no hay ninguna otra ciudad en Chile que crea en ese principio. Esto implica abrir una caja más grande y generar un parque de mitigación. Lo que genera en la parte alta darle un parque natural que le quite velocidad al río y este parque es inundable. O sea, que si hay una gran cantidad de agua se queda en este lugar, y cuando no haya nada se puede utilizar como parque para la comunidad”, afirmó él.
Otro punto que explica Sánchez, es el mejoramiento de los servicios públicos en los lugares aislados de la ciudad.
“Las principales necesidades que entregó esta mesa fue que tenemos una ciudad de contraste. Acá existen sectores con poco o mal acceso al servicio público en comparación a los lugares más conocidos de la ciudad. Principalmente podemos ver en la periferia o los lugares donde existen parcelas que tienen malos accesos a servicios, que eso tenemos que detenerlo. Para eso tenemos que dejar de mirar hacia al cerro. Hay muchos sectores de la ciudad que se pueden aprovechar para generar una forma distinta de organizar la ciudad”, sostuvo.
Sin embargo, han surgido algunas críticas respecto a este espacio por parte de algunos vecinos, respecto a la poca participación de los vecinos en el proceso.
Pero Sánchez deja sin argumento estas críticas.
“Yo veo en las palabras poco conocimiento respecto al proceso. Porque dentro de la mesa se explicó y conversó que la planificación no se hacia con la ciudadanía, sino que lo hacía reparticiones públicas. Pero con esta mesa creemos que si se puede generar una democracia participativa y activa”, sentencia.