Este lunes el Juzgado de Garantía de Punta Arenas impuso una pena de cuatro años de libertad vigilada intensiva a Tabata Muñoz Subiabre, quien fue condenada por un robo con violencia perpetrado en la Población Juan Cvitanic.
La joven, de 23 años, cumplió con preventiva durante casi ocho meses. El 30 de enero, en compañía de una amiga, concurrió a la calle Rafael Sotomayor y abordó a la víctima en la vía pública. Ambas la agredieron con golpes de pies y puños en diferentes partes del cuerpo y la condenada le pegó con una “chicharra”, una herramienta que utilizó después para romper los vidrios de su vehículo.
Mientras la agresión se perpetraba, las mujeres le sustrajeron 40 mil pesos en efectivo, un teléfono celular y las llaves del auto. Tras repeler a un testigo que intentó auxiliar a la víctima, las jóvenes huyeron con las especies.
Ambas fueron detenidas por la SIP de Carabineros dos días después del robo. Las cámaras de vigilancia en la calle Rafael Sotomayor captaron los hechos y la víctima –que conocía con anterioridad– las individualizó.
La amiga de Muñoz Subiabre fue condenada el 30 de julio en su calidad de cómplice del delito. Cumple con tres años de libertad vigilada intensiva y está sujeta al control del Centro de Reinserción Social de Gendarmería.
Ayer se leyó la sentencia de la joven de 23 años. Fue condenada en calidad de autora y el tribunal le impuso cuatro años de libertad vigilada.