El semirremolque que resultó dañado salió de Punta Arenas el 30 de marzo rumbo a Coyhaique para abastecer de propano a Lipigas. Luego de tres días de viaje el vehículo llegó al sector Bajo Los Caracoles, en plena Patagonia argentina.

Mientras enfrentaba una curva, el chofer se percató por el retrovisor que la rampla se desacopló y cayó al pavimento. La máquina se detuvo y la policía argentina debió cercar el área para manipular la peligrosa carga.

No se registraron daños al medioambiente ni a terceros, pero la máquina resultó con pérdidas avaluadas en tres millones de pesos, principalmente cortes en las mangueras.

Según una investigación realizada por la empresa de transportes, “existieron factores de intervención de posibles terceros”.

La querella fue declarada admisible este martes y el Juzgado de Garantía de Punta Arenas remitió los antecedentes al Ministerio Público. La empresa afectada solicita que se investigue un eventual delito de daños para determinar responsabilidades penales en el accidente.