Alberto Serrano, su director desde hace 12 años, comentó a El Mercurio que esta etapa incluye solo el primer piso. Se ultiman detalles gráficos, cromáticos y textuales para la apertura fijada para octubre. Esto significa que se anuncia un cambio fundamental, a pedido de las comunidades locales, donde el nombre del museo cambiará a Yagán Usi, que significa ‘tierra yagán’. No obstante, Alan Trampe, subdirector de Museos del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural (SNPC), ratifica que se discute este tema.
El museo abrirá sus puertas para un nuevo montaje y guión museográficos, que incorporan donaciones privadas recientes, adquisiciones, hallazgos arqueológicos y relevantes piezas de la colección del etnógrafo y sacerdote Martín Gusinde, que a inicios del siglo 20 fotografió y grabó a los pueblos fueguinos.
En la elaboración de este nuevo guión y montaje museológico, a cargo del director, confluye una labor interdisciplinaria: arqueólogos, científicos, conservadores, diseñadores, historiadores, miembros del Pueblo Yagán, todos en diálogo y, además, ceñidos a un “presupuesto inferior a los 200 millones de pesos”, según señaló Alan Trampe al mismo medio citado.
Alberto Serrano comentó que los cambios en esta renovación han sido conceptuales, más que estructurales, aunque “la sala del primer piso creció debido al nuevo diseño museográfico. Hay más color para explicar también el proceso de descubrimiento, exploración y colonización del área”.
Se mejoraron la iluminación y la unificación. “Nos ha servido para generar mejores condiciones cualitativas, de exhibición y, por consiguiente, de conservación de los valiosos objetos etnográficos restituidos”, expresó Serrano.