Cinco días duró el juicio en el Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas contra el teniente del Ejército de Chile, Jurgen Lamig Prieto, a quien finalmente lo condenaron por violencia innecesaria con resultado de lesiones graves.
Ayer se realizó la lectura de sentencia en donde se informó que el funcionario del Ejército es condenado a 50 días de libertad vigilada, sin embargo, debido a que se debe incluir los días que estuvo en arresto nocturno como abono, finalmente se considera que la pena ha sido cumplida.
Los hechos
La fiscal a cargo, Wendoline Acuña, comprobó que el delito se cometió el 26 de mayo de 2021, aproximadamente a las 2.30 horas cuando el condenado se encontraba realizando actos propios de su servicio consistente en fiscalizar el cumplimiento del toque de queda por orden de su jefatura debido al Estado de Excepción Constitucional decretado por la autoridad a raíz de la pandemia.
Cuando el teniente Jurgen Lamig estaba con su patrulla en una plaza ubicada en el Loteo Ovejeros de Punta Arenas procede a fiscalizar un automóvil. Mientras se encontraba por el lado del conductor, por la segunda pista se acerca un vehículo al cual el funcionario del Ejército le hace señas para que se detenga, lo cual el conductor y víctima de esta causa de iniciales V.J.R., hace caso omiso, sigue su trayectoria, teniendo el oficial que moverse del lugar para evitar ser atropellado.
Es así que el teniente Lamig hace uso de su arma de servicio, realizando siete disparos hacia el automóvil, impactando en la zona lumbar de la víctima, hiriéndolo de gravedad.
El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) integró la parte querellante, en su escrito cuestiona la proporcionalidad con la que actuó el funcionario del Ejército, asegurando que el teniente habría incumplido el Reglamento del Uso de la Fuerza (RUF) de las Fuerzas Armadas, catalogándola como desproporcional y sin que se acredite una legítima defensa.