Una hora antes de protagonizar el accidente vial, el sujeto había estado afuera de la casa de la víctima quien habría sido su conviviente y con quien comparte un hijo. Sin embargo, había sido formalizado por VIF en noviembre del año pasado, y mantenía la medida cautelar de alejamiento y prohibición de contacto alguno con su expareja, por tanto incurrió en el delito de desacato.
Al lugar había llegado en manifiesto estado de ebriedad preguntando por qué no le contestaba el teléfono, pidiendo a gritos alguna respuesta por parte de la víctima. Posteriormente abandona el lugar, de manera temporal, momento que es aprovechado por la mujer para contactar a Carabineros y realizar la denuncia. Estando en este procedimiento el imputado volvió al lugar conduciendo a gran velocidad y, tras perder el control del vehículo, chocó contra un auto estacionado en la cercanía a la casa donde carabineros registraba procedimiento. Los daños cometidos contra este automóvil de terceros fueron avaluados en $500.000.
Por tanto, al haber sido testigos de lo ocurrido, Carabineros se dirige hasta el lugar del choque percatándose del estado de ebriedad del sujeto, por su incoherencia al hablar y hálito alcohólico proceden a realizar alcotest confirmando su condición tras marcar 1.04 de alcohol por litro de sangre.
Por tanto, se fijó un plazo de investigación de 60 días y las medidas cautelares de arresto domiciliario nocturno, además de mantener la orden de alejamiento contra la víctima.