El Presidente Gabriel Boric se encuentra de visita oficial en la República Popular China, país con una población estimada de 1.425.671.300 habitantes, que tienen la fortuna de ostentar, el segundo Producto Interno Bruto (PIB), más alto del planeta, que se compone de 17.73 billones de dólares americanos al año 2021, solo superado por los Estados Unidos de América. Ambos países tienen notorias diferencias políticas, sociales, religiosas y culturales, pero bajo el análisis económico objetivo, los números no mienten, y se manifiesta que ambos saben hacer negocios, y con esto llevar dinero a sus países, al fin y al cabo, “Con dinero, baila el monito”.
En columnas anteriores he manifestado mi gran preocupación, por los síntomas claros y críticos, sobre de la situación económica del país y, por ende, de la región. El cierre de empresas, bajo crecimiento, inflación, el alza de despidos por necesidades de la empresa, alza del dólar, y una serie de otros indicadores, que nos hacen proyectar una recesión técnica, casi segura.
También hay migración de capitales, en función de empresas chinas, que ya han invertido fuertemente en nuestro país, y han realizado negocios en nuestra región, uno ejemplo claro, es que las empresas Edelmag y Australis, están bajo el control mayoritario de empresas del gigante chino, a lo anterior se suma que el ultimo barco de la empresa Navimag, el ferry fue diseñado en Canadá, y construido en el gigante asiático. Esto resume muy bien el negocio chino, que es la mayor fábrica de manufactura del mundo, llevando usted los planos, le construyen lo que sea, con este dinero fresco, salen a comprar empresas en todo el mundo.
Seguramente las visitas de nuestra delegación nacional tienen como objetivo atraer inversionistas, capitales y empresas; a esas giras van a pedir dinero; la receta de los países de izquierda Latinoamericana, que trabajan de forma coordinada, saben que el único capitalismo aceptable, es el capitalismo chino. Luego de la fuga de capitales e inversionistas, que fueron vilipendiados, y que huyeron de un desorden social y ánimos refundacionales, estamos ahora pagando las consecuencias. En estos momentos el mayor puerto de América del Sur, se contruye en Peru, con capitales chinos y en Argentina, gran cantidad de inversiones y compras las han realizado en dólares empresas chinas, sin lugar a duda, estas son compras e inversiones estratégicas y geopolíticas. El “Dragón dormido”, sabe esperar, y tiene muy buen olfato para las oportunidades de comprar barato.
El pensamiento chino es parte de una cultura en donde se trabaja duro, se ahorra en todo lo necesario, podemos encontrar que el aparato estatal chino, es un lugar en donde, no se desperdicia dinero, se debe ser eficiente como una máxima, y cuando se es eficiente, se vuelve a ser más eficiente aún, la película “American Factory”, disponible en Netflix, muestra muy bien la mentalidad asiática, una mentalidad milenaria. Es muy posible que, en el futuro, veamos con más frecuencia, patrones asiáticos en Magallanes.