La obesidad se ha instalado en nuestra región, no como un problema individual, sino como una verdadera epidemia silenciosa que exige la atención de todos. Los números son contundentes: Magallanes se ubica a la cabeza de las regiones con mayor prevalencia de obesidad en Chile. Esta no es una crisis de estética, sino de salud pública y bienestar social que nos afecta a todos, sin distinción.
La singularidad de nuestra región agrava una problemática ya de por sí compleja. El clima extremo y las prolongadas noches de invierno restringen de manera significativa la actividad física al aire libre, un pilar fundamental para combatir el sobrepeso. A esto se suma el aislamiento geográfico, que encarece y dificulta el acceso a alimentos frescos y saludables, haciendo que las opciones ultraprocesadas y de menor valor nutricional sean a menudo las más accesibles y económicas para las familias magallánicas.
El impacto de esta epidemia se extiende a cada rincón de nuestra sociedad. La obesidad es el caldo de cultivo de enfermedades crónicas como la diabetes, la hipertensión y los problemas cardiovasculares, lo que genera una sobrecarga insostenible para nuestro sistema de salud. Además, reduce la productividad laboral y, a nivel social, puede derivar en estigmatización y problemas de salud mental. Culpar a las personas es un error; debemos entender que este es un problema sistémico que requiere una respuesta integral.
No podemos seguir ignorando esta crisis. Es hora de que las autoridades, el sector privado y la sociedad civil actúen en conjunto. Necesitamos políticas públicas audaces que incentiven la alimentación saludable, mejoren la infraestructura para la actividad física (como gimnasios populares o espacios techados) y eduquen a la población desde la niñez. Es crucial fomentar la producción y el consumo local para diversificar nuestra dieta. La lucha contra la obesidad en Magallanes es un desafío que nos convoca a todos. Es una oportunidad para demostrar que, como comunidad, podemos unirnos para construir un futuro más saludable para nuestra región.