La indignación se ha tomado las calles y las redes sociales de Punta Arenas tras el brutal ataque sufrido por un estudiante en el emblemático Barrio 18 de Septiembre. Lo que debía ser un trámite cotidiano hacia un almacén terminó en un acto de saña injustificada que ha movilizado a los vecinos ante la falta de una detención inmediata.
El hecho, que dejó al joven con graves cicatrices físicas y psicológicas, ha levantado una alerta sobre la seguridad en los barrios residenciales y la peligrosidad de delincuentes habituales que circulan por la capital regional.
El incidente ocurrió a plena luz del día cuando la víctima fue interceptada por el delincuente. Sin mediar palabra, el sujeto utilizó un arma blanca para herir al joven:
Lesiones graves: El estudiante recibió dos cortes profundos en su rostro, marcas que lo acompañarán de por vida.
El botín: Tras herirlo, el agresor le quitó sus zapatillas y huyó, dejando a la víctima ensangrentada en la vereda.
Auxilio oportuno: Una profesora que pasaba por el lugar rescató al joven y lo trasladó de urgencia a un centro asistencial, evitando que las lesiones pasaran a mayores.
Ante la ausencia de capturas en las primeras horas, la comunidad inició una investigación digital. A través de grupos de Facebook e Instagram, los vecinos lograron identificar plenamente al presunto autor:
Historial delictivo: Se trataría de un joven conocido en el sector, con antecedentes que datan desde que era menor de edad.
Fotos con armas: La preocupación aumentó al viralizarse imágenes del sospechoso posando con armas de fuego, lo que refuerza su perfil de alta peligrosidad.
Presión social: "Todos saben quién es", es la consigna de los vecinos que han entregado nombres y direcciones a las autoridades para acelerar el proceso.
A pesar de que el estudiante ya fue dado de alta, el clima de inseguridad en el Barrio 18 de Septiembre es latente. Desde la Fiscalía se han instruido diligencias específicas a las policías. Fuentes ligadas al caso indican que el cerco se ha estrechado y que la detención sería cosa de horas, especialmente por el cúmulo de evidencia y testimonios aportados por los propios ciudadanos.