Diversos estragos produjo ayer la racha máxima de viento que, según el informe del Centro Meteorológico Zonal Austral de la Dirección Meteorológica de Chile, alcanzó una velocidad de 122 kilómetros, cuando el reloj marcaba las 12.03 horas. Los muelles Prat y Mardones fueron cerrados al tráfico de embarcaciones menores, según informó el capitán de puerto de Punta Arenas, Pablo Ferrada Orellana. Las labores para las naves menores, dentro y fuera de la bahía, fueron suspendidas.
En la ciudad algunos cables telefónicos cayeron, pero sin provocar mayores dificultades en la entrega del servicio.   Personal de Edelmag acudió a algunos “pedidos domiciliarios”, sobre todo de personas que sufrieron alguna baja en el suministro. También se supo de una luminaria que al mediodía cayó sobre una línea de alimentación eléctrica en el sector de Pampa Redonda. La emergencia produjo un corte en el suministro eléctrico, pero la reposición fue rápida.
Varias personas perdieron el equilibrio por el temporal y terminaron en el suelo. Parte del cierre perimetral del humedal, las rejas de fierro, fue derribado por el viento (en la fotografía).