
El proceso es gratuito y la prueba de admisión está fijada para el sábado 20 de noviembre, en los tres niveles. Los plazos ya fueron extendidos en una oportunidad, especialmente, por el bajo interés que han demostrado las familias, a pesar de que se invertirán $500 millones en infraestructura, los profesores deberán ser de primer nivel y se les entregará todo el apoyo para que los alumnos sean de “excelencia”.
Hasta ayer, se habían devuelto sólo 20 fichas para séptimo, 30 para octavo básico y 150 para primero medio.
Desde el Liceo Luis Alberto Barrera manifestaron que se registra diariamente un alto flujo de apoderados retirando los formularios y haciendo consultas, pero aún no se completan formalmente los cupos.