
“Lo importante es que las cosas se hagan bien y de común acuerdo con los trabajadores. No se pueden hacer las cosas con una pistola en el pecho. No creo que sea el espíritu del gobierno lo que está ocurriendo en ENAP”, señaló el presidente de la Comisión, diputado Alejandro García-Huidobro (UDI), tras la reunión, reafirmando dicha determinación.
Por lo tanto, ayer, a nivel regional, sólo les restaba conocer a los trabajadores el resultado de las prometidas gestiones para decidir finalmente la realización del paro estratégico que habían anunciado la semana pasada para el lunes 22, mismo día en que se ponen en ejecución las desvinculaciones; tema que anunciaron en la Asamblea del Sindicato a eso de las 19.00 horas de ayer en el marco de la serie de reuniones sostenidas en el centro del país.
Asamblea
Con los ánimos caldeados comenzó la cita en el gimnasio de Cordenap, que reunió a más de 300 trabajadores de la filial ENAP Magallanes, con la directiva del sindicato encabezada por su presidente Alejandro Avendaño, esto, luego de que tras la exposición de las negociaciones logradas por los dirigentes en la capital, los trabajadores alzaran la voz increpando a la dirigencia al exigir respuestas concretas en torno a las gestiones y aduciendo, a partir de ello, falta de firmeza por parte de sus representantes ante la gerencia y las autoridades de gobierno, puesto que se manifestaron preocupados por la inminente llegada de las cartas de despidos.
Este clima se generó en medio de la incertidumbre que rondaba por la información que debía llegar desde Santiago referente al resultado de la negociación entre la Comisión y el ministro de Energía, Ricardo Raineri, quien pasada unas horas se comunicó con la vice presidenta del gremio, Erica Hidalgo, para pedirle un día más de análisis de la propuesta del sindicato y el escenario futuro para la empresa.
Ante este aplazamiento, el sindicato acordó la realización del paro estratégico para el lunes 22, asegurando a los trabajadores que, en el caso de que se les remitiera a algunos el documento que acreditaba su desvinculación, sin antes tener la respuesta del ministro, no descartarían acciones de presión mayores como una huelga, y que de todas maneras, tendrían el respaldo correspondiente del servicio jurídico que contrataron ante la eventual situación.
Una vez terminado el encuentro, el grupo salió a marchar por el bandejón de avenida Bulnes reafirmando su postura ante la medida.