Un conductor de taxi colectivo fue víctima del robo de su vehículo y de la sustracción de especies. Los delincuentes se aprovecharon del exceso de confianza de Miguel Torres, quien dejó estacionado el vehículo en las afueras de su domicilio, con las llaves puestas y el motor en marcha. De acuerdo con la información que recogió personal de Carabineros, al adoptar el procedimiento, el episodio sucedió el jueves en la noche, pasadas las 23.30 horas. El conductor llegó a su casa, en la población Santos Mardones, y dejó el colectivo frente al domicilio con las puertas sin seguros, las llaves a la vista y el motor andando.
La víctima ingresó a su hogar, confiado en que la vecindad es muy tranquila y que nada le sucedería al vehículo. Pero como en la confianza está el peligro, esta vez los resultados fueron distintos ya que después de permanecer un momento en la casa se percató al salir que el vehículo ya no estaba.
El jefe de la Primera Comisaría, mayor Hernán Benavides, confirmó este episodio indicando que el vehículo fue ubicado una hora después. Los delincuentes lo abandonaron en Pasaje Cinco esquina Trinidad. Una vez que la víctima fue notificado se dirigió al lugar pudiendo verificar que le habían robado una radio de banda ciudadana, la radio de música, el teléfono celular, un amplificador, 28 mil pesos en dinero efectivo y los documentos del vehículo.
Aunque Punta Arenas continúa siendo una ciudad segura, respecto a otras del país, el llamado es a no ser tan confiados, sobre todo con los vehículos. Como la “ocasión hace al ladrón”, se reforzó la idea de no dejar autos con puertas abiertas y menos con el motor andando porque este es un escenario propicio para el accionar de los antisociales.