Tres condenas, de 61 días cada una, fue la sanción judicial que recibió Rodolfo José Marnell Parker, más el pago de tres multas de seis Unidades Tributarias Mensuales cada una ($ 676.890), todas ellas “como autor del delito consumado de estafas”. Reuniendo los requisitos legales el sentenciado recibió el beneficio de la remisión condicional de la pena, “quedando sujeto al control administrativo y de asistencia de la sección correspondiente de Gendarmería por el término de un año”. Mientras que la multa la podrá cancelar en 12 cuotas.
El Ministerio Público presentó un requerimiento en procedimiento simplificado en contra de Marnell Parker, por considerarlo autor de reiterados delitos de estafa.
Una de ellas data de mayo de 2007, cuando el acusado ofreció por televisión arrendar un inmueble, ubicado en calle Velastegui, en Punta Arenas. Una mujer se interesó en el aviso y se contactó con el imputado, quien, haciéndose pasar por dueño del inmueble, le entregó la propiedad en arriendo, recibiendo en el acto, de manos de la afectada, la suma de $ 300.000 en dinero efectivo como garantía, cantidad que debía restituirle en caso que el arriendo no pudiera concretarse, lo que así en definitiva ocurrió, puesto que el imputado no era dueño del inmueble y el contrato de arriendo nunca se celebró. Además, el dinero nunca se lo devolvió a la víctima.
Otra estada
En el mismo periodo, y utilizando igual modo de engaño, Rodolfo Marnell tomó contacto con otra persona, a quien le ofreció en arriendo el mismo inmueble. Asegurándole exclusividad le exigió la entrega de $ 300.000 en dinero efectivo, como pago anticipado. Según la investigación fiscal, el arriendo nunca se concretó debido a que todo era un engaño. El acusado no era el dueño del inmueble y no tenía la posibilidad de cumplir con el contrato, perjudicando al afectado en la suma ya indicada.
Tercer engaño
Posteriormente, en julio de 2006, una persona concurrió al taller mecánico de Rodolfo Marnell, ubicado en calle Angamos Nº 1380 de Punta Arenas, y le entregó su auto para que se lo reparara. Marnell asumió el compromiso de reparar el móvil por la suma de
$ 680.000 más el costo de los vidrios, lo que avaluó en la suma de $ 300.000. Fue así que la víctima le entregó primero $ 600.000, sin embargo, con posterioridad, el acusado le solicitó la entrega de más dinero para supuestas reparaciones y compras de repuestos, logrando así que en definitiva el afectado le entregara un total de un millón de pesos. La denuncia llegó a la fiscalía porque el acusado nunca efectuó la reparación del vehículo, dejándolo abandonado en el taller y perjudicando así a la víctima en la suma antes señalada.
En la audiencia respectiva, al imputado se le consultó si admitía responsabilidad en los hechos estampados en el requerimiento o si por el contrario solicitaba una audiencia de juicio, optando Rodolfo José Marnell Parker, por aceptar su responsabilidad.