La Secretaría Regional Ministerial de Salud, hizo un llamado a moderar la alimentación durante las fiestas de fin de año, ya que normalmente se suele aumentar la ingesta de alimentos de alto contenido calórico. Disfrutar del tradicional asado, parrilladas, queques navideños, pan de pascua, cola de mono, entre otros, es habitual. El problema es que estos “desarreglos” alimenticios pueden hacer que una persona aumente varios kilos, además de ocasionar otras consecuencias como incremento del colesterol y problemas gastrointestinales.
Los expertos señalan que durante las fiestas de fin de año aumentan enfermedades como gastritis, inflamación de la vesícula y en algunos casos, cuando la ingesta de alimentos es muy elevada, se pueden presentar enfermedades más graves que incluso pueden obligar a que la persona sea hospitalizada.
La nutricionista de la Seremi de Salud, María Soledad González, explicó que es conveniente preferir los cortes de carnes de vacuno sin grasa, las carnes blancas como pollo y pavo, las que hay que cocinar idealmente sin piel. Además, si se consume alcohol, tiene que ser de forma moderada, agregando mucho hielo al vaso. Tanto en el caso de la comida como de la bebida lo más importante es ponerse un límite y cumplirlo, recuerda que el alcohol también aporta calorías. También es importante comer liviano durante el día, por que la cena suele ser abundante y generalmente, con muchas calorías. La profesional puntualizó que antes de servirse “de todo”, hay que colocar en su plato una buena cantidad de ensalada y vegetales.