El buen resultado que registró el Liceo Juan Bautista Contardi en la Prueba de Selección Universitaria (PSU) que rindieron sus egresados de cuarto medio en diciembre pasado, no se limitó a tener un puntaje nacional, obtenido por Felipe Ávila, y un promedio regional , alcanzado por Diego Carrillo, sino que en base al ponderado de todos los estudiantes, se ubicó en el lugar número 11 entre los colegios municipalizados a nivel nacional.
Además, el establecimiento se posicionó en el cuarto puesto entre los mejores de Magallanes, siendo superado sólo por tres entidades particulares pagadas.
El director del Liceo Contardi, Raúl Muñoz, afirmó que durante el último consejo de profesores “había confianza en que nuestros alumnos iban a tener un buen desempeño en la PSU”, reconoció, porque “trabajamos a conciencia y responsablemente con ellos”, agregó el docente.
Además del reconocimiento de los diversos actores de la educación local, respecto del logro del establecimiento, esto ha sido calificado como una muestra de que las entidades públicas pueden estar dentro de los mejores, por lo que también se ha convertido en una especie de ejemplo que, de pasada, aumentó la exigencia para el resto.
“Naturalmente que la educación municipalizada puede registrar altos puntajes en las evaluaciones. Todo depende de cómo se trabaje”, aseguró Alvarado, quien destacó que “tenemos que identificar nuestro papel en la educación. Nuestra responsabilidad es muy grande, porque somos formadores de personas”, subrayó el también asesor del Liceo Bicentenario.
La receta del éxito se basa, para el directivo, en el trabajo de toda la comunidad, incluyendo los apoderados, a quienes les atribuye un rol fundamental para el cumplimiento de las responsabilidades de los alumnos.
“Con un trabajo mancomunado y comprometido de padres, alumnos, profesores, asistentes de la educación y todos quienes se desempeñan en el colegio, hemos tenido este buen resultado. Esto demuestra que todos están cumpliendo de buena forma su rol”, manifestó Alvarado.
Pero no sólo son felicitaciones para el director, puesto que estos promedios en la PSU, impulsan a aspirar mejores presentaciones en años venideros.
“La comunidad está muy contenta y entusiasmada, así que vamos a redoblar nuestros esfuerzos para que todos nuestros alumnos, en su mayoría de clase media y vulnerables, tengan buenos resultados y puedan superarse”, aseveró el director. Para esto, insiste el docente, debe estar el compromiso constante de la comunidad.
Más y mejor
Una meta para Alvarado sería que en los próximos años cinco o más estudiantes lleguen a tener puntaje nacional en la PSU, pero “hay que estar tranquilo y entender que lo de ahora, involucra años de trabajo, entonces hay que ir paso a paso, pero nos creemos capaces de lograrlo”, aseguró.
El promedio del liceo en esta última versión de la evaluación nacional, llegó a los 592 puntos.