Un fuerte portazo en la nariz a todos los habitantes que residen actualmente en la Región de Magallanes y la Antártica Chilena, dio ayer el gobierno del Presidente Sebastián Piñera luego de que, pasado el mediodía el ministro del Interior, Rodrigo Hizpeter , acompañado por sus pares de Energía y Minería, Ricardo Raineri, y Laurence Golborne, respectivamente, en conferencia de prensa en el Palacio de La Moneda, anunciaran la concreción indeclinable del alza del gas domiciliario en la zona a partir de febrero, y con ello la aceleración del avance del movimiento ciudadano hacia el paro regional que había advertido la Asamblea Ciudadana de Magallanes (ACM) se iba a hacer realidad en caso de una respuesta desfavorable de la nueva administración de gobierno.
Y es que finalmente, tras no recibir respuesta en el plazo acordado que estaba pactado a las 12.00 horas y posteriormente salir a entregar declaraciones respecto de la insistencia de ahondar en las cuatro medidas paliativas que lanzaron y que consisten en la apertura de la primera sucursal de la Agencia Chilena de Eficiencia Energética en la Región de Magallanes, la reconversión de gas eficiente de aproximadamente dos mil calentadores, la entrega de mil subsidios de reacondicionamiento térmico para viviendas existentes y la duplicación del número de subsidios (6 mil) que hoy existen dentro del programa para el subsidio al consumo de gas natural, a los representantes de la voces de la comunidad magallánica no les quedó otra opción que anunciar que el paro regional va.
Es así como la exposición de los secretarios de gobierno donde Hinzpeter -con un fuerte tono de voz- enfatizó que se hará respetar el orden público, Golborne justificó la decisión de ENAP, y Raineri detalló el plan de apoyo a la estatal, fue duramente criticada por la Asamblea, sobre todo los dichos del titular del Interior, quien pese a destacar la ampliación del subsidio a las cuentas eléctricas, advirtió que si en las manifestaciones que se desarrollen en la zona se cometían quebrantamientos del Estado de derecho, actuará la fuerza pública. En ese sentido, ya rondan los trascendidos de que arribó, en la madrugada, contingente policial para actuar en el caso de que se altere el orden público.
Por otra parte, consultado por el costo político que podría tener esta férrea respuesta, Hinzpeter declaró: “Gobernar no es un concurso de popularidad, por lo tanto este gobierno está dispuesto a tomar las decisiones correctas, aunque sean difíciles. Es cierto que hay algunas más populares que otras, pero lo importante no es la popularidad de la medida, sino que el grado de bien común que agrega esa medida. Estamos tomando una decisión que mira a las 15 regiones, que protege a una empresa que le pertenece a 15 millones de chilenos, y que en consecuencia la vemos correcta”.
Fortalece movimiento
La Asamblea Ciudadana de Magallanes (ACM), sin embargo, ha dado muestras de transversalidad y unión en esto últimos días y no ha bajado los brazos pues sigue convocando a los magallánicos a que desde el miércoles paren sus actividades para rechazar la actitud gubernamental en torno al alza del gas.
Uno de los voceros, Eugenio Bahamonde, muy molesto tras estas declaraciones comentó: “Lo que acabo de escuchar es indignante, porque en vez de buscar soluciones reales y valideras, se están hablando de 6.000 subsidios en circunstancias que se hablaban de 10 mil y tantos y ya bajaron a 6.000. Esto es una chacota, cuando va a entender el Gobierno, el señor ministro del interior que aquí está hablando con personas serias, con toda una región que es difícil vivir en Magallanes”.
El escenario que se plantea entonces es el paro indefinido regional a partir de las 00.00 hora de mañana “y no habrá pie atrás”, dijo Bahamonde.