Un comercio que funcionó “a media máquina”, pese al llamado de sus dirigentes a normalizar la atención de público, fue la situación que se vivió ayer en Punta Arenas. La Confederación de la Producción y el Comercio (CPC) se descolgó de la movilización, argumentando una “porfiadez terrible”. El presidente de la organización, Alejandro Kusanovic, dijo que la organización acogía el aumento del 3% en el alza del gas. Postura a la que se sumó la Asociación Gremial Industrial de Magallanes (AGIA).
La idea era que el comercio abriera sus locales comerciales. En la práctica esto no se dio así, principalmente por la falta de locomoción, lo que impidió que muchas personas llegaran a sus lugares de trabajo.
ZonAustral
La ZonAustral vio restringida sus operaciones en zona franca, porque la entrada de avenida Bulnes quedó bloqueada para el ingreso de vehículos. Todo conductor que tuviera la intención de acceder al módulo central o locales anexos tenía que dejar el auto estacionado en las afueras del recinto e ingresar a pie.
El domingo abrieron todos los locales, hasta las 16.30 horas. Luego, el lunes Sánchez&Sánchez no abrió y Abu Gosch atendió entre las 11 y las 15.00 horas. Ayer, un 90% de los locales del módulo central mantuvo sus puertas cerradas. En el patio de comidas atendieron dos locales y también abrió la pista de patinaje. En la administración del recinto franco se reconoció que enero es uno de los meses económicos más importantes. De acuerdo a las consultas realizadas se informó que con este paro la ZonAustral deja de vender un promedio diario de US$1.3 millones.
A estas cifras se suman las pérdidas que está sufriendo el sector turismo. La hotelería y paquetes turísticos están en crisis, según voz de personeros ligados a este rubro, como Juan José Salas. Son muchísimas las reservas que se caducaron y miles de turistas afectados. Como dicen ellos, se sienten “atrapados” en un país extranjero que ellos mismos buscaron como destino turístico.
Mientras se mantenga la paralización, que hasta ayer sumaba seis días, es imposible que el comercio pueda restablecer una normal atención de público.