Con el rol protagónico que adoptó el gremio del transporte menor en el pasado paro regional, la comunidad abordó distintas formas de agradecer lo que a juicio popular fue un factor relevante en los acuerdos alcanzados. Las muestras de reconocimiento, las palabras de agradecimiento, aliento e incluso el dinero extra que le entregaban los pasajeros a los choferes de colectivos han ido mermando con el paso del tiempo, según los mismos transportistas, el entusiasmo tuvo su auge los dos o tres primeros días posteriores al paro.
Carlos Guajardo, chofer de colectivo señala: “Las palabras de agradecimiento aún continúan, la gente muestra su cariño y gratitud con nosotros siempre que se entabla la conversación en el auto, pero el tema de las propinas ya casi no se da, pero no importa, si al final nosotros estamos trabajando”.
“La gente aún deja sus vueltos como forma de ayuda, al menos es lo que dice Charles Carrillo”, otro conductor de locomoción colectiva menor. “Yo he reunido hasta 2.500 pesos con las propinas que deja la gente” agrega. Aproximadamente 120 mil pesos dejó Carrillo de percibir producto de la movilización.
La conductora Karina Sánchez dice: “La gente todavía trata de ayudar con su propina a los que no pudimos trabajar, mal que mal fueron siete días, lo típico es que te pagan con 500 pesos y te dicen que te quedes con el vuelto, o te pagan con mil y te dan los 300 pesos que quedan”.
En promedio son 2 mil ó 3 mil pesos los que algunos conductores perciben gracias a los aportes voluntarios de algunos pasajeros, cifra no menor, pero incomparable contra los 50 ó hasta 100 mil pesos que algunos choferes dejaron de percibir con el paro.
Tacopa en tanto ha entregado unos adhesivos que van al interior del vehículo, que identifican a los conductores y dueños que participaron de las movilizaciones y que están en los listados que confeccionó la asociación. Con esto se espera que el público entregue su aporte solamente a los colectiveros que se sacrificaron realmente por la paralización regional.