Pericias e intervención por parte de la Contraloría Regional solicitó ayer, a través de una carta entregada en la Oficina de Partes del organismo, la Asociación de Funcionarios del Gobierno Regional, ya que acusan por parte de “las jefaturas de confianza” de la intendenta de abuso de poder, discriminación, agresión jerárquica y acoso laboral. Los trabajadores señalan que desde este año se ha alterado la estructura del servicio, creándose nuevas jefaturas “sin respaldo legal, con ausencia de designación de funciones y descripción de cargos”, lo que ha derivado en “constantes errores administrativos y confusión” respecto de lo mismo, “por estar operando inorgánicamente”, se indica en la misiva, requiriendo además a la entidad fiscalizadora que solicite a la máxima autoridad regional los documentos que respaldan la nueva estructura que se habría conformado.
Añadido al escrito se adjunta un saludo a los funcionarios del Gobierno Regional de Magallanes, donde se asegura que el año pasado se logró el 100% de Inversión del Servicio y del Programa de Mejoramiento de la Gestión, lo que no se condice, a juicio de los trabajadores, con el despido de cerca del 30% de los empleados a fines de 2010 y con la llegada de nuevas personas en alto cargos, perjudicando a quienes llevan años desempeñándose en el lugar, puesto que ha habido una reasignación de grados.
En este mismo sentido, acusaron que las nuevas jefaturas han bajado las calificaciones de los trabajadores, argumentando que “las notas máximas sólo están reservadas para lo perfecto y que aún éstos deben dar algo más para ser calificados con nota siete”, añadiendo que se les manifestó que “hasta aquí las labores no se realizan de la mejor manera”, aseguraron los funcionarios.
Finalmente, se dio a conocer una misiva con fecha 20 de enero, dirigida a la intendenta Kusanovic, donde se le insiste en el deficiente clima laboral que ronda en las oficinas debido a los “malos tratos y del acoso laboral que se ha producido durante todo 2010”, lo que según los funcionarios, “ha recrudecido con más fuerza, lo que está incubando en una situación que no sabemos en qué va a terminar”, se expresa en la carta. Se añade que las personas que cometen dichos atropellos son de la confianza de la máxima autoridad regional, ante lo cual solicitan que “asuma la actitud de directora” y enmende lo que está sucediendo.