
Es en este contexto que toma relevancia la medición que la compañía hizo de 39,6 km por hora la racha máxima para un período de casi tres años de investigación siendo que las ráfagas máximas en Magallanes mensualmente llegan a 100 km por hora.
“Lo que encontramos grave es que esa misma base de datos se utilice para hacer la modelación de los contaminantes que genera la mina y, peor aún, el cálculo de emisiones, es decir, el polvillo que se desprende de los camiones que transportan el carbón”, retrucó Butorovic, quien haciendo un seguimiento riguroso a este proceso acusó la no rectificación completa del estudio, porque a su juicio, “no debieran haberse entregado nuevos datos arreglados, sino haberse hecho un estudio nuevo”.