El martes, tras la determinación de los dirigentes ciudadanos de la Asamblea de no asistir a la cita que había fijado la intendenta Liliana Kusanovic para abordar con ellos la conformación de la mesa de trabajo por el gas, esa misma tarde tomaron la decisión de elaborar una declaración para comunicar a la opinión pública el motivo de la inasistencia.
Según el documento, transcurridos diez días de la fecha que enviaron al biministro de Energía y Minería, Laurence Golborne, la carta solicitando información técnica necesaria para participar en la instancia, “la Asamblea Ciudadana de Magallanes no ha obtenido respuesta de parte de quien ha sido el interlocutor válido en el Gobierno. De esta manera, recalcamos que no cabe ni se justifica reunirse con una autoridad regional que carece de capacidad de resolución en materias relacionadas con la futura ley sobre el gas en Magallanes”, enfatizaron.
Seguidamente, insistieron en lo que han venido sosteniendo desde que desató el conflicto por el gas, y que es que la máxima autoridad regional “no es la interlocutora válida” ante la comunidad, al argumentar que en el momento que debía haber tenido un acercamiento con la comunidad para analizar y resolver el alza del hidrocarburo “se negó al diálogo, provocando los efectos que todos conocemos. Por esta razón, no estamos disponibles para blanquear su imagen ante la ciudadanía”.
Finalmente la ACM arremetió fuertemente al rol de la intendenta para constituir la mesa, pues declararon que “somos nosotros quienes vamos a decidir quiénes y cuántos integrarán nuestra representación en dicha instancia de trabajo, por ello no aceptaremos que terceros pauteen a la ciudadanía en esta materia de interés para toda la comunidad”.