Si bien se ha reforzado el contingente policial fuera de los establecimientos educacionales y se ha dispuesto de estacionamientos reservados para el transporte escolar fuera de ellos, la congestión a la hora de salida de los estudiantes vuelve a tomar protagonismo en Punta Arenas. Con el reingreso de los estudiantes a los diferentes establecimientos educacionales, reaparece la congestión vehicular en horarios de salida o ingresos a estos estamentos.
Aparte de las molestias que puedan ocasionar estos fenómenos viales a los conductores, son los mismos choferes los que incurren en conductas inapropiadas que revisten un peligro latente con el marco de menores que se ven involucrados. El estacionarse en doble fila, el cruce intempestivo de los menores o el descenso de escolares en lugares no aptos para aquello son algunas de los vicios en los que se incurren en estos horarios.
Las horas de mayor afluencia son: de 7.50 a 8.10 horas, de 12.45 a 13.30 horas y de 17.45 a 18.30 horas.
Los principales establecimientos que están siendo afectados son los ubicados en el anillo central de Punta Arenas, entre los más conflictivos puntos son Fagnano entre Armando Sanhueza y Chiloé, Waldo Seguel entre Chiloé y avenida España, avenida España entre Waldo Seguel y avenida Colón, avenida Colón entre Carlos Bories y Magallanes y finalmente el pasaje Otto Magens entre Mardones y El Ovejero. Este último se ve afectado directamente por el tamaño reducido del pasaje, mientras que los puntos anteriores es principalmente por la gran cantidad de vehículos que transitan en esos lugares, sumado a los sectores que están destinados al estacionamiento en esas calles.
Carabineros, por su parte, ubica al comienzo de cada jornada escolar un funcionario en las afueras de los diferentes establecimientos educacionales. Si bien su tarea está relacionada al tránsito en la cercanía del colegio, además están destinados para la educación vial de los educandos, asegurar el bienestar de los menores y por ende, fiscalizar y controlar el normal tránsito de los automóviles. Es por esto, que si bien no es el espíritu de la institución, el efectivo policial está facultado para requerir verbalmente a algún conductor que esté afectando el normal tránsito vehicular, además puede cursar una infracción a los conductores que no respeten las leyes del tránsito.
El mayor Hernán Benavides señala que “la idea de los efectivos policiales en estos puntos es de carácter educativo y preventivo, pero esto no quita que ante una infracción flagante pueda cursar la multa pertinente”.