
“Yo estaba trabajando cuando me llama mi señora para decirme que al hijo le habían pegado a la salida del colegio”, dijo el padre Manuel Lemus.
Unos amigos, al parecer testigos de la agresión, ayudaron al menor y lo subieron a un colectivo. Así llegó a su casa, prácticamente inconsciente y sin recordar nada. “Estaba desorientado y con pérdida de memoria”, señaló la madre, Elizabeth Juica.
“Llorando me dijo me pegaron y fui al liceo a hablar con el director quien lo envió a un consultorio cercano y luego lo derivaron al hospital”. Los médicos le diagnosticaron un traumatismo encéfalo craneano moderado y también una lesión en el tabique nasal.
Lo que averiguó el liceo es que el agresor sería un ex alumno del establecimiento, expulsado hace unos tres años por comportamiento. “El médico nos dijo que mi hijo necesitará de a lo menos seis meses para recordar lo que sucedió ya que sufrió pérdida de memoria parcial”, señaló la madre.