Unas mil personas llegaron ayer en la tarde hasta el gimnasio del Liceo Salesiano San José, a la reunión donde comenzó a tomar cuerpo la primera demanda masiva en contra de la inmobiliaria Parque Cruz de Froward, responsable del cementerio que el viernes fue cerrado por la autoridad sanitaria, hasta que no mejoren y resuelvan cada una de las observaciones realizadas en el sumario.
Al centro de la pista estaban los líderes del movimiento, Sandra Muñoz y Miriam Almonacid, en compañía del abogado Javier Opazo, listos y atentos a responder cada una de las preguntas que surgieran a partir de lo tratado en el encuentro.
Sandra es la madre de Claudio Monge Muñoz, el niño que murió en un accidente casero y cuyos restos fueron sepultados en el Cementerio Parque Cruz de Froward. El 15 de febrero los padres descubrieron que la urna flotaba producto del agua subterránea que fluye en el lugar. Esta fue la punta del “iceberg” y a este reclamo se sumaron otros.

Demanda

La sanción prendió los ánimos en la gente que ayer llegó masivamente al San José. Después de algunas exposiciones vinieron las consultas del público, las que fueron respondidas por el abogado, quien ya prepara lo que llamó “la primera y gran demanda colectiva”, además de “la clausura de la patente municipal”.
“Llegaremos hasta las últimas consecuencias con esto, porque exigimos que se haga justicia”, pidió Sandra Muñoz, mientras Miriam Almonacid ordenaba el encuentro, dirigiéndose a la masa con un micrófono inalámbrico que le permitía un desplazamiento más fluido, al igual que el abogado.
Almonacid explicó que la reunión de ayer surgió a partir de las inquietudes e incertidumbre que tiene la gente. Y, además, porque necesitaban entregar algunas instrucciones para que participen en esta inédita demanda colectiva. “La idea no es hacer de esto un populismo, sino al contrario, plantear una referencia del dolor que sienten muchas familias, y me incluyo yo que sepulté ahí a mi padre”. Sobre sus hombros carga el peso de haber sido vendedora del cementerio durante cuatro años. “Vendí algo que jamás pensé que no funcionaba, como es el sistema de drenaje. Eso sí no tapé nada, pero tampoco fui clara porque no sabía lo que estaba ocurriendo y por eso, para remediar mi error, siento la responsabilidad moral de apoyar a toda esta gente”, señaló.
Sandra Muñoz, ícono en este movimiento, después de responder varias consultas de la gente y entregar la dirección donde comenzará a atender ahora (José Menéndez Nº 544 de 9.30 a 18.30 horas), entregó a Diario El Pingüino su opinión de la resolución sanitaria. No está conforme porque esto mismo se pudo haber hecho el 15 de febrero, cuando fue exhumado el cuerpo de su hijo. “La seremi no actuó en forma expedita, siendo que tenía videos y pruebas de lo que estaba sucediendo. Lo que se consiguió fue gracias a que intervino el ministro”; y advirtió que “vamos a llegar hasta las últimas consecuencias, porque queremos la sanción máxima”.
Opazo, que tomó la causa, velará porque el cementerio indemnice y devuelva a la gente lo que pagó. “A lo menos queremos que se les pague 25 millones de pesos a quienes tengan gente sepultada, más derechos respectivos, y en la municipalidad vamos a solicitar la clausura de la patente”.