La fuente de la eterna juventud

General
11/04/2011 a las 13:26
Generalmente el envejecimiento es sinónimo de huellas físicas profundas en el ser humano, muchas de las cuales endurecen y hacen perder expresión en el rostro. Estas huellas, cuando son muy notorias, pueden complicar y provocar, sobre todo a las mujeres, daños sicológicos y pérdida de la autoconfianza.
Tenemos, por ejemplo, la exacerbación de las líneas faciales y arrugas, como las famosas y comunes “patas de gallo”. Pero hoy todo tiene posibilidades de grandes correcciones y mejoramiento, y a Magallanes llegó esta “suerte de fuente eterna de la juventud, como llaman algunos a la Toxina Botulínica (Botox) y el Ácido Hialurónico, de manos del cirujano máxilo facial, doctor Mauricio Vargas Zec. “Hace un par de años estoy desarrollando estos procedimientos, los cuales están acorde a las nuevas tecnologías y tendencias. Uno de los principales desafíos actuales, en una amplia gama de especialidades, es retardar el envejecimiento. La idea principal es lograr un aspecto más fresco, mas lozano, natural y juvenil”, explica el profesional.
En el mundo entero, “famosos” de la pantalla grande, de la política, de todos los ámbitos públicos, lucen nuevos rostros gracias al relleno de surcos y rejuvenecimiento.
Además de estar disponible el botox estético para la disminución y atenuamiento de las arrugas, de las “patas de gallo” y de las líneas profundas de expresión en el rostro, está disponible también el uso del Botox como agente terapéutico en un número importante de casos de bruxismo, dolor facial y dolores de cabeza.
¿Qué es el Botox?
La toxina botulínica, más conocida como Botox, es una proteína natural que se extrae de una bacteria, que también se utiliza como medicamento. Éste debe ser sólo usado por prescripción médica estricta. Hace más de una década se aprobó, a través de la FDA (Food and Drug Administration), para tratar problemas en el músculo ocular; pero los médicos se dieron cuenta que las arrugas del rededor de los ojos mejoraban ostensiblemente. Es así como comenzó a ser utilizado para estética, como producto de uso cosmético.
Los efectos del Botox duran unos cuatro a ocho meses, volviendo el músculo a la normalidad y la arruga siendo otra vez visible, sin embargo, la reiteración del tratamiento conlleva a un atenuamiento cada vez más prolongado y definitivo de la arruga. El Botox se inyecta en zonas específicas y bien determinadas, en un procedimiento que toma sólo minutos. Generalmente son las mujeres quienes desean verse más bellas y jóvenes, sobretodo por el tema de las arrugas, ya que el paso de los años no les resulta indiferente. Hay nuevas técnicas disponibles y una es el Botox (Toxina Botulínica tipo A), que elimina las arrugas rebeldes de la cara. Esto, por medio de su inyección en ciertos músculos faciales, que son los culpables que las arrugas aparezcan. En el fondo, el Botox paraliza el músculo en cuestión, logrando que la piel se vuelva a estirar. Por lo tanto, el Botox, se inyecta directamente al músculo responsable de la arruga, el cual, no podrá contraerse nuevamente, sin poder provocar la arruga.
Esta es una técnica de medicina estética que ha ido ganando cada vez más adeptos, incluso desplazando a técnicas de cirugía estética como el lifting.
El último año han pasado varios connotados personajes por las manos del doctor Mauricio Vargas Zec, aunque el profesional reconoce que siempre son más mujeres, “porque es un proceso particularmente femenino, aunque también está indicado para los hombres, para las mismas arrugas y en casos especiales, para eliminar las “líneas de marioneta“, que son ciertas arrugas que se proyectan de la comisura del labio a la zona del mentón”. Por otra parte, el aumento y relleno de los tejidos blando faciales pueden realizarse con Colágeno o -más actualmente- con Acido Hialurónico, que tiene una gran biocompatibilidad y un mayor tiempo de permanencia en la piel. Este medicamento es ideal para el rejuvenecimiento de los cambios faciales con la edad, como son las arrugas estáticas, los surcos naso labiales y muy útiles además en la atrofia de los labios y las comisuras labiales. De hecho, el modelado de los labios – llamado diseño de sonrisa- es uno de los procedimientos ideales a realizar con el Ácido Hialurónico.
Lo más pedido
El relleno de surcos de la cara con Ácido Hialurónico y el borrado de algunas líneas de expresión muy marcadas con Botox, son los procedimientos más solicitados. La ventaja que tienen, explicó Vargas, es que son reversibles, por ser temporales en el tiempo, ya que después de un periodo se borra su efecto y/o se atenúa.
“Sin embargo, en el caso de las líneas de expresión con Toxina Botulínica se va logrando un atenuamiento que es mucho más permanente en el tiempo, por el menor uso de los músculos que están provocando las arrugas. Puede durar seis meses, ocho y cinco meses, dependiendo de las indicaciones, de los surcos de la cara y de la antigüedad”, señaló.
Estos son procedimientos muy rápidos y en algunos casos, cuando es necesario, se administra anestesia local, como cualquier otro procedimiento dental.
El valor de estos tratamientos depende de la cantidad a inyectar. En una persona se pueden ocupar uno o dos frascos de Ácido Hialurónico y el producto en sí es extremadamente caro, porque las marcas son únicas en el mercado mundial. “El costo va más por el lado de los medicamentos que del procedimiento”, dijo Mauricio Vargas.

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