Si bien las cifras de denuncias de estos hechos se ha estabilizado en la zona, aún la tasa de
agresión dentro del núcleo familiar es muy alta. La violencia intrafamiliar (VIF) es un flagelo que afecta a toda la sociedad. Es una situación de abuso de poder o maltrato, físico o síquico, de un miembro de una familia sobre otro. En el caso del físico, implica actos que atentan o agreden el cuerpo de la víctima tales como empujones, bofetadas, golpes de puños, golpes de pies; mientras que el síquico comprende actitudes que tienen por objeto causar temor, intimidar, y controlar las conductas, sentimientos y pensamientos de la persona a quien se está agrediendo como las descalificaciones e insultos.
Lamentablemente Magallanes posee el triste récord de liderar la lista de regiones en este ítem, registrándose 882 casos por cada 100 mil habitantes (0,92%), prácticamente empatado con la Región de Tarapacá que es primera en el ránking con un 0,94%.
"Las consecuencias del maltrato infantil se hacen visibles a mediano y largo plazo en el desarrollo sicosocial y físico de las personas. Detrás de problemas de aprendizaje, de comportamiento y agresividad probablemente se esconden situaciones de maltrato físico, abuso y/o abandono negligente", explica la sicóloga Evelyn Gómez.
"Además, un niño maltratado tiene mayor riesgo de convertirse en un adulto maltratador y violento. Los menores que son maltratados severamente tienen mayor grado de aceptación frente al uso de la violencia y agresión y uno de cada dos niños que son víctima de violencia grave considera que el castigo físico sirve para la formación, lo que es muy perjudicial", agrega Gómez.
Sin embargo, quienes más sufren de este tipo de agresiones son las mujeres. A causa de los maltratos, se pueden enumerar algunas consecuencias como abuso y dependencia de alcohol y/o drogas, además lesiones y daños más permanentes como cortes, quemaduras o mordidas.
"En el plano sexual, la VIF da paso a embarazos no deseados, disfunciones sexuales, obligación ejercida por parte del varón de la práctica de aborto, daños físicos y sicológicos en específico en el plano sexual, abuso, acoso y violaciones y diversas fobias sexuales y de la sexualidad en general", afirma la sicóloga.
El mapa de la VIF
En los últimos cinco años se presenta un crecimiento sostenido de los casos de VIF en Magallanes. Sin embargo, en el 2010 hay un leve descenso en las denuncias.
"En el último tiempo la gente se ha atrevido a denunciar más estos casos, por eso se ha manifestado un alza. Felizmente el año pasado disminuyeron un poco las denuncias, pero eso no significa que bajaremos la guardia, continuaremos apoyando las diversas campañas que se realizan para combatir este mal", asegura el mayor de Carabineros Hernán Benavides.
Según el oficial, se está llegando a un límite de denuncias de los casos y que en las próximas cifras los números tenderían a estabilizarse.
Las cifras entregadas por Carabineros señalan que durante el 2010 en la comuna de Punta Arenas se registraron 884 denuncias y 326 detenidos.
"Cuando recibimos una denuncia, nuestro personal se desplaza hasta el lugar de los hechos y nuestra prioridad es la atención a la víctima, luego vemos la posibilidad de detener al supuesto agresor. La tasa de detención es bastante alta respecto de otras zonas del país", afirma Benavides.
El uniformado destaca que la institución trabaja con Asuntos de la Familia, delegados del Plan Cuadrante y Juntas de Vecinos para combatir el problema.
El sector de la comuna que registra más casos (422) es el que cubre el Cuadrante 5, que abarca la Población Archipiélago de Chiloé, Nelda Panicucci, Fitz Roy y Pedro Aguirre Cerda, mientras que el sector en que menos ocurren estos episodios es el área norte de la ciudad.
"No es normal ser agredido por familiares, por eso nosotros hacemos todos los esfuerzos para acercarnos a la comunidad para prevenir estos casos", declara Benavides