
Dicho terreno se encuentra ubicado en calle Paula Jaraquemada, entre Fray Camilo Henríquez y Juan Enrique Rosales.
La idea es complementar dicho proyecto con una sala de música y teatro, y de computación, con el objeto de convertirse en un centro de encuentro no sólo para niños y jóvenes, sino, también adultos y adultos mayores, donde puedan deleitarse y, a la vez, aprender, capacitarse e instruirse.
“Cuando los jóvenes cuenten con eso van a desparecer muchos malos hábitos y costumbres que se aprenden en la calle”, opina Aicón.
Otro de los problemas son las personas que se reúnen en la calle a beber alcohol. Esta situación, según cuenta, se viene dando desde hace muchos años, incluso desde antes que él asumiera como presidente.
“Tenemos tres o cuatro parados en la esquina obstaculizando la pasada”, cuenta el dirigente, agregando que en diversas oportunidades han tratado de evitar que sigan repitiendo este comportamiento, pero ha sido en vano, hasta el momento.
Ello le preocupa, pues, según dice, cuando ya oscurece “no se puede ni mandar a los niños a comprar pan, por temor a que le pidan plata, los insulten”.
Por eso para Brígido Aicón es necesario que la sociedad se involucre más y empatice con las personas en situación de calle. Piensa que si tuvieran un lugar donde ser acogidos, podrían cambiar su modo de vida y vivir con más dignidad. “Hoy día tenemos que unirnos por el desarrollo de la región”, dice.
Otro de los problemas que indigna al presidente de la Junta de Vecinos “12 de Octubre” es el uso que muchos residentes le dan a las calles y calzadas del sector: el de estacionamientos improvisados.
Aicón recuerda que con gran esfuerzo los dirigentes se abocaron a pavimentar las calles que faltaban, postulando al Programa de Pavimentos Participativos.
“La primera tarea que tuvimos aquí fue una laguna que todos los años, cuando llovía, se formaba en Camilo Henríquez con Lastarria”, recuerda.
Posteriormente el Servicio de Vivienda y Urbanización (Serviu) construyó un colector de aguas lluvia.
Sin embargo, “después de tener calles limpias, nuestras veredas bonitas, anchas, viene a hacerse mal uso de ellas”, expresó el dirigente vecinal.
Es el caso, tal como Diario El Pingüino pudo comprobarlo, de las calles Paula Jaraquemada, Eusebio Lillo, Juan Enrique Rosales y Diego Portales. Allí se puede observar numerosos vehículos livianos y pesados, estacionados sobre las veredas o en la calle, obstaculizando la visión de los demás conductores. Muchos de éstos se encontraban en evidente desuso y condición de chatarra.
Al respecto, Aicón indicó que en la próxima reunión con los socios de la junta de vecinos plantearán este tema para consensuar una solución.
Logros
Dentro de los principales logros de esta junta de vecinos se encuentra la ampliación y remodelación de la sede vecinal, ubicada en calle Paula Jaraquemada 2052, la que fue reinaugurada el jueves recién pasado.
Gracias a fondos Presidente de la República pudieron equipar con cocina, refrigerador, campana y lavaplatos la cocina.
Asimismo, el presidente vecinal destacó los diversos proyectos que han concretado para el mejoramiento de viviendas, donde cada uno de ellos ha beneficiado a entre 25 a 28 personas (Fosis, Serviu, PAIC, Senama y Presidente de la República).