
Esta iniciativa nace gracias al interés del Servicio Nacional del Adulto Mayor, SENAMA; y el Fondo de Solidaridad e Inversión Social, FOSIS, por propiciar espacios concretos para que ambas instituciones realicen acciones conjuntas a favor de estas familias.
El programa consiste básicamente en que personas mayores voluntarias, brinden apoyo escolar a niños y niñas que cursan entre 1° y 8° año de educación básica, pertenecientes a familias insertas en el Programa Puente, apoyo que se realiza una vez por semana en la vivienda de los niños.
Por su parte, las familias asumen voluntariamente el compromiso de hacerse responsable de la participación en actividades que implica el proyecto y en motivar a sus hijos para desarrollar con éxito este programa, con miras a mejorar el rendimiento escolar a lo largo del año.
Programa en la región
El lanzamiento oficial de esta iniciativa se realizó con un acto encabezado por el ministro de Planificación Felipe Kast, acompañado del seremi de Planificación, José Manuel Aguirre, y los directores regionales del FOSIS y SENAMA, Gonzalo Rosenfeld y María Soledad Solo de Zaldívar respectivamente.
En la ocasión, se entregaron a los 16 nuevos niños y niñas beneficiados el material educativo a utilizar para el 2011, así como también a los 8 asesores seniors que han asumido el desafío de ayudar a escolares pertenecientes a las familias más vulnerables de la región.
La docente Carolina Borquez, con 42 años de aula, fue la encargada de entregar un mensaje por parte de los “asesores”, reflexionando sobre la educación que se entrega hoy en día. “Nos hemos olvidado de inculcarle a nuestros niños la expresión del amor en su manera más profunda y simple, y tal vez por eso tenemos una sociedad un tanto indiferente y tenemos aulas con niños que hacen bullying y cosas que antes no se hacían”, señaló la emocionada docente.
Posteriormente, fue el turno del ministro Kast, quien agradeció a las voluntarias la vocación de educar, señalando que “la educación tiene mucho de amor, que nunca a un profesor les deje de brillar los ojos cuando mire a alguien a quien le está enseñando y que se proyecte, porque no hay sueño más lindo que decir yo estoy abriéndole caminos a estos muchachos”.
Cabe destacar que este programa se inició como experiencia piloto el año 2003 para luego expandirlo a otras regiones y comunas del país. En el caso de Magallanes, esta iniciativa comenzó a ejecutarse el año 2008, beneficiando hasta el 2010 a 42 niños y niñas.