A una pena de 600 días de presidio fue sentenciado ayer Erik Patricio Inostroza Chaval, como autor del delito consumado de lesiones graves en perjuicio de Héctor Mauricio Ancao Raquil, aunque el Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas le concedió el beneficio de la reclusión nocturna.
Este hecho de sangre ocurrió el 19 de septiembre del año pasado, cuando el afectado, Héctor Ancao, se encontraba bebiendo con varias personas, entre ellas el acusado, en una de las casas ubicadas al interior de la ganadera Cañadón Grande, en el kilómetro 20 de la Ruta Y-545 de Punta Arenas.
Según los antecedentes que el fiscal Eugenio Campos Lucero expuso en el juicio, en un momento se originó una discusión, oportunidad en la cual Erick Inostroza, sin causa y motivo justificado, agredió con diversos golpes en el cuerpo a la víctima y luego con un trozo de madera perteneciente a un cerco perimetral, le pegó en la cabeza.
Producto de la brutal golpiza la víctima resultó con lesiones de carácter grave, entre otras, “policontusiones, fractura, herida contusa en el cuero cabelludo y hematomas faciales perioculares”.
Para los jueces quedó plenamente establecido que el acusado Erik Patricio Inostroza Chaval, tiene una participación culpable y penada por la ley, toda vez que participa en los hechos materiales de una manera directa e inmediata; no apareciendo su acción como reacción a una “agresión ilegítima”.