En todo el ambiente tuerca se habla de los pormenores de esta nueva versión del Rally de Punta Arenas, tanto de los aciertos como las dificultades o los diversos momentos de tensión que se vivieron en esta jornada tuerca. Cabe consignar que el automovilismo es un deporte de alto riesgo y las medidas de seguridad tienen que velar por un buen espectáculo.
Una muestra de ello es lo ocurrido a Yanko Masle y Marcos Loaiza, quienes al momento del accidente venían a una velocidad aproximada de 180 kilómetros por hora, pero contaban con buenas medidas de protección lo que impidió de alguna manera que las consecuencias fueran mayores a pesar del estado en que quedó la máquina.
Por otro lado, comentario obligado es la elección de los caminos, ya que consultando a experimentados pilotos, concuerdan que el haber elegido caminos tan rápidos no es bueno, ya que por reglamento del Patagonia Rally Club PRC no establece el límite de velocidad de los vehículos en competencia, siendo fundamental esto aplicándose en el Rally Mundial y el Rally Nacional, donde el promedio de velocidad no puede exceder los 137 kilómetros a la hora en autos N4.
Sabido es que la esencia y el espíritu de la disciplina del Rally es la Velocidad y la regularidad. Por eso en la Federación de Automovilismo de Chile –Fadech- existen dos entes que regulan este deporte; La Asociación Nacional de Velocidad –Anave- y la Asociación Nacional de Regularidad –Anare-. Este es un tema que aún no se ha tomado en cuenta y esperamos que para el análisis del próximo campeonato sea incluido en la discusión.
Mérito al
espíritu deportivo
¿Hasta dónde puede llegar el amor al deporte y el espíritu del mismo? Siempre es bueno y desde esta tribuna queremos destacar a dos pilotos que hicieron hasta lo imposible para estar presentes en esta carrera. El primer caso es de Sandro Vojnovic con Marcos Sepúlveda, quienes terminaron la jornada sabatina con problemas en su caja de cambios. Cerca de las 16 horas del mismo día Sandro, viajaba a Río Gallegos para adquirir los repuestos y poder estar presente el domingo. En Punta Arenas lo esperaba Alexis Ravena, para trabajar hasta altas horas de la madrugada con el fin de subsanar el problema. Gracias a esto, pudo terminar en la carrera del domingo en la tercera posición de la categoría Súper 2.000 y sumar puntos para el campeonato.
Ambulancia
sin Paramédico
Este hecho lo corroboramos como medio de comunicación con dos integrantes del Masle Rally Team, quienes declararon que al momento de llegar la ambulancia al sitio del accidente el chofer declara que no tiene paramédico. Este hecho es de suma gravedad ya que en las condiciones que se encontraba Marcos Loaiza era incluso para una evacuación aeromedica. En esto la organización del Patagonia Rally Club tiene que tener autocrítica y entregar una explicación pública a todos quienes somos parte de la familia del automovilismo. Esperamos que este hecho no se vuelva a repetir en ninguna otra carrera de la región ni del país, ya que no queremos ser un precedente de que las normas de seguridad no se están cumpliendo a cabalidad en la Región de Magallanes, sobre todo si tenemos pensado proyectar a nuestra región como sede de una fecha del RallyMobil.
Estuvimos conversando con uno de los organizadores del Rally de Timaukel, cuya última versión se realizó el 2009 y en esa oportunidad contó con 3 ambulancias. Una con médico general y las otras dos con paramédicos. Un ejemplo que en medidas de seguridad no hay que fijarse en gasto, esto como un mensaje tanto para los organizadores de las pruebas automovilísticas como los pilotos que compiten en ellas, ya que en gran medida que Masle-Loaiza hoy estén en mejores condiciones se debe a la excelente puesta en marcha de las medidas de seguridad instaladas por Masle en su coche.