Dado que 2010 no fue un año fácil para la petrolera del Estado ,al comenzar a fines de ese año, con un plan de egresos que desvinculó a más de 450 trabajadores de la compañía (273 en Magallanes), lo que le valió una serie de cuestionamientos locales la forma cómo estaba llevando a cabo la contención de los costos y luego la crisis del gas que se sumó a las críticas respecto de los contratos establecidos con la empresa productora de metanol en la zona, Methanex, McLeod manifestó las intenciones de ENAP de favorecer con el sumnistro a la ciudadanía, haciendo hincapié, sin embargo que la solución siempre iba a ser la exploración, porque “sino estamos destinados a morir. No hay más reservas”.
“Si por alguna razón se nos acaba el gas, cuál es la alternativa, Gas Natural Licuado (GNL), tres veces más caro, o de tres pasamos a nueve, si necesitamos propano casi siete veces, el diesel casi ocho veces, por lo tanto, lo que tenemos que hacer es encontrar más gas natural para tener precios más baratos”, señaló el ejecutivo.
Siguiendo esta línea, McLeod fue consultado, porqué la solución no podía ser cerrarle la llave a Methanex y de esa forma garantizar el consumo para la comunidad dada la dificultad en exploración que no asegura, según lo indicó hace unos meses atrás, reservas para el largo plazo.
La respuesta del alto ejecutivo fue que el gas barato ya se acabó y por lo tanto, iba a ser imposible encontrarlo más barato, a ello sumado que “con lo que hay de reservas probadas cada vez va a ser más caro”.
“Hay un poder comprador, pero hay que encontrar gas para todos los consumidores”, agregó.
En la actualidad, la firma canadiense consume un millón 320 mil metros cúbicos del hidrocarburo, que le traspasa la estatal, lo que equivale a un 35% de la torta del destino del gas que produce, pues 27% (1 millón 10 metros cúblicos) corresponde a Gasco y 32% (1 millón 210 metros cúbicos) a los consumos internos de la empresa.
“Nuestro compromiso con Methanex son 2 millones 195 mil metros cúbicos al día, y porqué estamos entregando mucho menos del promedio, porque nos lo está pidiendo la ciudad que no entreguemos más, por eso es que nosotros sacamos producción que le entregamos a Methanex y se la entregamos a Gasco para mantener a la ciudad funcionando”, declaró.
Asimismo, adelantó que en julio próximo se vislumbra una etapa crítica para abastecer a los consumidores, aunque aseguró que “estamos haciendo esfuerzos y dejando de operar algunas máquinas para poder tener gas suficiente para nuestros clientes que son Gasco primero, y después Methanex. La ciudad no se va a quedar sin gas”.
El tema de la intervención del Estado en torno a una subvención al consumo que han planteado algunas organizaciones sociales locales, McLeod señaló que era un tema político en el que ENAP no podía actuar sin el impulso de una iniciativa legal previa.
En cuanto al posible cierre de la refinería Gregorio, subrayó que la planta ya no tenía la capacidad de sacar todos los productos, y que cada mes se estaba dejando de ganar un US$ 1 millón por permanecer detenida. Es por ello que puntualizó que era un asunto que estaba en estudio.