Esta semana, fue el seremi de Energía, René Ampuero, quien salió a reconocer la posibilidad de recortes de suministro de gas ante un escenario negativo de abastecimiento del combustible a la región, respondiendo, en parte, a las preocupaciones que habían surgido por parte del diputado independiente Miodrag Marinovic y consiguientemente la Confederación para la Producción y el Comercio (CPC) regional.
Esto porque, la interrupción, en el marco del Plan de Contingencia de ENAP repercutiría, frente al eventual escenario, sobre uno de los principales consumidores del hidrocarburo: Gasco, empresa que proporciona la energía a los hogares magallánicos y a la empresa eléctrica Edelmag que necesita en un 85% el gas para la generación de electricidad.
La principal inquietud radicó, de esta forma, en la posibilidad de probables alzas en las tarifas de la luz para los consumidores domiciliarios derivadas del costo que tendría que asumir Edelmag para producir la electricidad con las turbinas a diésel, su sistema de respaldo que posee una capacidad productora de sólo el 15%.
“Es cierto que dentro del Plan de Contingencia está considerado, en algún momento, si llegara a ocurrir que las temperaturas son demasiado bajas, se le haga un pequeño recorte a Gasco el que podría afectar a Edelmag, porque el contrato es entre estas dos empresas”, ratificó Ampuero.
Sin embargo, sus dichos apuntaron posteriormente a asegurar que la ciudadanía no se vería afectada porque siempre iba a tener la prioridad.
De hecho, el mismo intendente, Arturo Storaker, al día siguiente señaló que si se produjera una escasez la caída de la planta de metanol de Methanex sería una opción a barajar ya que iba a velar porque la población tuviera los suministros básicos y actualmente al precio que están, hasta que no se regule o tarifique de manera definitiva el hidrocarburo.
De este modo, hay quienes piensan que al ponerle “paños fríos” a esta situación, la probable crisis se podría acrecentar, además de aparecer como atenuante el silencio de las principales empresas y el propio Gobierno central en la discusión, pues ni el biministro Laurence Golborne, ni Gasco ni Edelmag se han querido referir a la situación, pese a las insistentes peticiones de este medio.