
Según explican los expertos, la ausencia de nieve se debe principalmente al arribo de ondas de aire cálido, que impiden que la temperatura descienda lo suficiente para que el líquido de las nubes se congele.
Hasta la fecha, el centro meteorológico constata que las precipitaciones líquidas acumuladas son de 278.3 mm, cifra que supera en más de 60 mm la cantidad normal esperada para el período enero-julio. Sin embargo, para este fin de semana se estima que deberán presentarse frentes de aire helado que propiciarían las precipitaciones sólidas.