Rodrigo Saavedra Conus fue liberado tras pasar cuatro años preso, acusado de violación.
Su hija reconoció haber mentido presionada por su madre. El juez de la Corte Suprema Hugo Dolmetsch reveló que la joven -hoy de 18 años- que en 2002 acusó falsamente de violación a su padre, Rodrigo Eduardo Saavedra Conus, hoy "no puede vivir tranquila", tras haber reconocido la mentira que hizo que su progenitor, siendo inocente, pasara cuatro años preso.
En enero de este año la joven firmó una declaración jurada ante notario en la que dijo que en 2002, cuando tenía nueve años y presionada por su padre, Romina Arratia Navarrete accedió a denunciar a su padre, que había abandonado el hogar familiar para ir a vivir con otra mujer en otra región de país.

Tras esa declaración la joven fue interrogada por Dolmetsch, que también se entrevistó con los médicos y sicólogos que en esa época establecieron que la niña había sido víctima de abuso.

"Ella dice que está muy arrepentida, que ha sufrido mucho. No puede vivir tranquila por este error de una niña de nueve años", dijo el magistrado, que confirmó que el "hecho nuevo" de que la niña reconociera haber mentido "constituyó un antecedente suficiente" para iniciar los nuevos peritajes y establecer "que era verdad lo que dice hoy, y no lo que dijo ayer".

Dolmestch dijo además que estima "absolutamente justificado" que el ex guardia de seguridad considere demandar al Estado, e indicó que "la indemnización tendrá que contemplar" la gravedad del "horror, porque estos no son errores".

Tras la resolución del máximo tribunal que estableció su inocencia, Rodrigo Saavedra Conus abandonó ayer jueves, antes de medianoche, la ex Penitenciaría, donde estaba cumpliendo una pena de 15 años.

Fuente: Cooperativa