
El presidente de la Junta de Vecinos Nº 19, Eusebio Lillo, Juan Loaiza explicó que en junio del año pasado le hicieron entrega del inmueble reparado, que según lo estipulado con un presupuesto de $ 13 millones se podían efectuar los trabajos. No obstante, la Municipalidad de Punta Arenas le otorgó otros $ 11.800.000 que también se habrían gastado en la reparación del recinto, pero “nunca supimos en qué gastaron esa plata”, acusó el dirigente.
“Fui a hablar con el alcalde (Vladimiro) Mimica y no me dio respuesta. Le pedí conocer el detalle de los gastos, pero hasta el día de hoy no sabemos el destino de nuestros recursos”, aseguró Loaiza. Incluso, por el “pésimo” estado en que aseguró se encuentra la sede vecinal, duda que se hayan comprado los materiales que se informaron, pues “en una parte se dijo que iban a poner planchas de maciza, pero hay planchas de cholguán”
A juicio del representante vecinal, “los trabajos no fueron bien fiscalizados por la directora de obras municipales”.
La misma crítica emitió el presidente de la Junta de Vecinos Nº 36 El Pingüino, Nolberto Catalán quien aseguró que “las obras están pésimas, además que tuve que pedir una subvención para realizarlas”, manifestó.
Catalán detalló que a su junta de vecinos se le otorgaron $ 22 millones que no le han entregado por un problema administrativo, pues “la municipalidad no ha enviado a la Subdere un documento necesario para que nos otorguen los fondos”, aseguró tras realizar diversos trámites donde le informaron que esa era la limitante para la liberación de los recursos. Ante esto, cuestiona “por qué tenemos que andar pidiendo subvenciones y pagar de nuestro bolsillo la mano de obra si tenemos dinero”.
La presidenta de la Unión Comunal Punta Arenas, Rosa Zúñiga manifestó que en la reunión con la contralora “hemos denunciado todas las falencias en las obras que han afectado a las juntas de vecinos, donde se han mal entregado y no se ha fiscalizado por parte de la unidad técnica encargada de ejecutar este proyecto, como fue la municipalidad”, aseveró.
La dirigenta acusó que “se utilizaron materiales usados” para la reparación de los inmuebles, agregando que se han inundado y sufrido diversos daños que no se condicen con las obras que se debieron efectuar. “Por eso vinimos a pedir que se fiscalice y se determine qué se hizo con las platas”.
Por su parte, Marinovic expresó que “las obras que se describieron en los contratos que se iban a realizar, finalmente no se hicieron de acuerdo a lo establecido en las bases”, por lo cual espera que la Contraloría Regional pueda realizar una investigación y determinar qué gatilló que las sedes vecinales estén en tan malas condiciones, a pesar de haber sido reparadas hace pocos meses.