“El tabaco es como la novela, Crónica de una Muerte Anunciada, porque tarde o temprano el paciente que fuma va a presentar daños en su organismo, como endurecimiento de las arterias, en los pulmones, próstata, vejiga, entre otros”, indicó el cardiólogo Juan Aguilar Pérez, refiriéndose a las consecuencias que trae aparejada la adicción a los cigarrillos. Una consulta que se hace la gente es por qué los pacientes que fuman muchas veces terminan presentando dificultades para caminar. La respuesta del profesional es que erróneamente se asocia la obstrucción de las arterias solamente al corazón, pero es de todo el cuerpo. “Esta es una enfermedad general, no es que aisladamente se enferme el corazón, y por eso muchas veces van acompañadas de fallas múltiples, como accidentes vasculares y renales. Además de una claudicación intermitente, es decir la imposibilidad de mantener una marcha por un tiempo por el dolor asociado a la falta de oxigeno y estrechez de una arteria de la pierna”. Es importante tener en cuenta que uno de los efectos de la nicotina es que endurece las arterias y las va cerrando, dejándola menos elásticas y al mismo tiempo la va obstruyendo. Además que la mayoría de los subproductos del tabaco son cancerígenos, previene el doctor Aguilar.