El Mandatario destacó que durante la jornada "el país está funcionando con bastante normalidad las personas han podido llegar a sus lugares de trabajo y la gente está pudiendo hacer su vida en forma bastante normal”, subrayando que “cuando se paralizan los países, nadie gana, todos pierden”. El Presidente de la República, Sebastián Piñera, junto a su señora, Cecilia Morel, y el ministro de Planificación, Joaquín Lavín, se reunió este mediodía en La Moneda con un grupo de beneficiarios de los programas e iniciativas sociales que impulsa el Gobierno, tales como el posnatal de 6 meses, el bono Bodas de Oro, la eliminación del 7% de salud y el programa de Asignación Social para erradicar la extrema pobreza.
En este contexto, manifestó que “me parece tan contradictorio que mientras la inmensa mayoría de los chilenos se levanta temprano y se esfuerza todos los días por sacar adelante a su familia, a su país y lo mismo hace el Gobierno en beneficio de todos los chilenos, haya otros que también se esfuerzan, pero se esfuerzan justamente por lo contrario, se esfuerzan por paralizar a nuestro país”.Por ello, sostuvo que “una cosa es una marcha y otra cosa es intentar paralizar el país. Cuando se paralizan los países, nadie gana, todos pierden”.
Al respecto, dijo que “afortunadamente hasta ahora el país está funcionando con bastante normalidad.
El Jefe de Estado señaló que “todos los chilenos y chilenas tenemos derecho a reunirnos, manifestarnos y marchar, eso es parte de una democracia, pero hay dos condiciones que creo que son muy importantes: lo primero es hacerlo en forma pacífica, sin atentar contra los derechos de otras personas, sin provocar violencia, sin destruir la propiedad pública o privada; y lo segundo es que, cuando hacemos estas marchas y estas manifestaciones, tenemos que tener plena conciencia de que las soluciones a los problemas no se logran simplemente marchando, se logran con diálogo y con acuerdos, se logran con esfuerzo y con trabajo, como por ejemplo lo hace la señora Mónica Herrera”.
El Mandatario sostuvo que en la jornada de hoy “lo lamentable es que la intención fue otra: la intención fue causarle daño a Chile y causarle daño a los chilenos”, enfatizando que “el instrumento es equivocado. La forma de solucionar los problemas es con diálogo, acuerdos, buena voluntad, y nuestro Gobierno ha estado siempre con las puertas abiertas para dialogar con todos los sectores”.