
adhesión para suspender las actividades laborales fue baja. Según se pudo constatar en terreno, la atención en servicios públicos se realizó con relativa normalidad. Por otra parte, en Punta Arenas hubo una veintena de barricadas, cortes de luz y daños, tanto a la propiedad pública como privada, en diferentes puntos de la ciudad, especialmente de madrugada.