Preocupados por el futuro escolar de sus hijos, hasta la Corte de Apelaciones llegaron ayer nueve padres del Liceo Nobelius de Punta Arenas, quienes interpusieron un recurso de protección en contra de la dirección del establecimiento por las medidas aplicadas después de la “toma” del colegio. Según indicó el apoderado Juan Cristóbal Álvarez, “no se habría procedido bien con el reglamento”, porque las sanciones contemplan suspensión definitiva de los alumnos hasta que finalice el año escolar con la rendición de exámenes libres y trabajos comunitarios fuera del ámbito escolar con costas a los apoderados.