
Este conflicto entre las partes se originó en mayo, cuando el 23 de ese mes la Cormupa emitió una resolución interna informando que el director interino del plantel iba a ser en adelante Hugo Bizama y no Ramírez, como lo había manifestado un mes antes en otro documento emitido.
A juicio del docente, el realizado fue un acto discriminatorio, ya que no existía ningún motivo de incumplimiento profesional o un sumario, que motivara el cambio repentino en la decisión del empleador.
Es por esto que Ramírez presentó un recurso de protección en la Corte de Apelaciones, el que fue acogido y se obligó al sostenedor a reintegrarlo en el cargo de director (i), no obstante, el organismo decidió recurrir a la última instancia y apeló a la Corte Suprema, la que tampoco le dio la razón.
El funcionario expresó que si su empleador no acata el pronunciamiento del tribunal, evaluará las acciones a seguir, como solicitar un pago indemnizatorio por el proceso que ha debido asumir, “el que pudo haber sido perfectamente evitable, pero se quiso llegar a esta instancia”, afirmó Ramírez.